Retinal, más rápido que el retinol y nuevo ingrediente de moda en el cuidado de la piel

Ahora que habíamos comenzado a llevarnos bien con el retinol y a apreciar los resultados que arrojaba sobre nuestra piel, ¿va y aparece un nuevo ingrediente que promete hacer lo mismo? Es normal llegar a un momento en el que la información sobre cosmética nos satura y se convierte en un ruido más cercano a la desinformación que a la utilidad. Pero el retinal no va de eso, sino todo lo contrario, en realidad sería algo así como un predecesor del retinol, un antepasado mucho más potente que, sin embargo, no necesita prescripción médica.

Si el retinol se utiliza para fortalecer la piel, corregir problemas de pigmentación, prevenir la aparición de comedones, regular la segregación sebácea, estimular la producción de colágeno, así como evitar su pérdida, renovar la piel y mejorar la apariencia de los poros, el retinal hace lo mismo pero en un menor tiempo y, por tanto, con una mayor potencia. Esto se debe a que ambos son retinoides.

Concretamente, en la familia de los retinoides encontramos al ácido retinoico (tretinoína), al retinal y al retinol, por este orden porque el primero es más potente que el siguiente. Es como si en la familia, el ácido retinoico fuera el abuelo; el retinal, el padre, y el retinol, el nieto. Así lo resume The INCI Coder, web encargada de desmenuzar cada ingrediente cosmético y su utilidad. “Siguiendo la analogía de la familia real británica, el retinal es el príncipe Carlos, el siguiente en la línea del trono”, apuntan.

Si bien es cierto que el ácido retinoico consigue resultados más potentes, solo se puede utilizar bajo prescripción médica y en un periodo de tiempo limitado al generar una mayor respuesta en la piel. El picor, la rojez o la descamación son respuestas habituales de la epidermis a los tratamientos con retinoides; es la denominada retinización, el proceso por el cual la piel se hace resistente al efecto de los reitnoides.

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Margarita Velasco

Por otro lado, el retinol y el retinal sí pueden aplicarse sin prescripción médica, ya que la respuesta de la piel a su uso no es tan importante. Eso sí, en esta escala familiar el retinal, al ser más efectivo, causa algo más de reacción en la piel, de ahí que la mayoría de los cosméticos con retinoides empleen antes el retinol, al tener una respuesta más ligera y, por tanto, más fácil de trabajar. El retinol es algo así como la mejor forma de iniciarse en los retinoides y el retinal es perfecto si quieres potenciar sus efectos porque sientes que el retinol no es suficiente. Esta mayor potencia también acelera los procesos. Mientras con el retinol debes esperar unas semanas hasta empezar a notar cambios, con el retinal la respuesta es más rápida.

Las cualidades del retinal han hecho que, en los últimos años, cada vez sean más las marcas que se lanzan a incluirlo en sus fórmulas al poder así asegurar resultados más visibles. La curiosidad de los 'frikis de la cosmética' ha crecido en paralelo a este desarrollo cosmético y la demanda es cada vez más considerable. Al igual que sus familiares, a la hora de emplearlos, es siempre preferible hacerlo de forma espaciada para que la piel se acostumbre a su efecto y hacerlo en la noche o acompañado de una protección solar alta si se hace de día. El mercado es más habitual encontrar retinal en sérums de noche o cremas que combinan el ingrediente con otros calmantes para que su sensorialidad sea más agradable.

Retinal en la cesta de la compra

Encontramos retinal en cosméticos como el Crystal Retinal 1 Serum de Medik8, un sérum de noche que multiplica por 11 los efectos del retinol al incluir a su padre, el retinal, en su fórmula. En su caso, incorpora un 0,06% de retinaldehído encapsulado estabilizado para aumentar los resultados. Al cóctel se suman ácido hialurónico, vitaminas C y E o niacinamida, entre otros.

Otra forma muy cómoda de comenzar la relación con el retinal es a través del Retrinal Cream de Avène. Su formulación ofrece dos versiones, una con un 0.1 y otra con un 0.5. Al incorporar su famosa agua termal, a la que se suman vitamina E y el péptido Relastide, que ayuda a potenciar la producción de eslastina de la piel y, por tanto, mejorar su estructura, se trata de una crema más hidratante, ideal para la introducción gradual del retinal, pudiendo comenzar por la crema de menor porcentaje y pasarse después a la opción con un porcentaje mayor.

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Los tratamientos de día y noche también se pueden ver beneficiados del uso del retinal, algunos tan populares como el Sesretinal Mature Skin de Sesderma, ahora 32,09 en PromoFarma. Se trata de un sérum liposomado que promete reducir las molestias asociadas a los retinoides gracias a la combinación del retinal con sus ‘biorretinoides con efecto retinol like’ y factores de crecimiento de origen vegetal, ácidos hialurónico, glicólico y mandélico, además de la niacinamida.

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Manual de uso de los retinoides

Siempre que se comienza a utilizar el retinol, es necesario seguir un protocolo con el que lograr que nuestra piel se lleve bien con el recién llegado y que se puede trasladar al retinal. La farmacéutica Rocío Escalante, titular de Arbosana Farmacia y experta en dermofarmacia, explica los pasos a seguir al introducir el retinol:

1. Hazlo de forma progresiva para ver cómo responde la piel. Este es el proceso mencionado anteriormente de retinización. “Se trata de un proceso mediante el cual la piel se vuelve resistente a la irritación que pueden provocar. Esto puede durar varias semanas. Por eso aconsejamos empezar a usarlo 2-3 veces a la semana, y luego pasar a días alternos”, explica la farmacéutica.

2. A veces la teoría falla y algunas pieles no se retinizan y la reacción de la piel puede ser más agresiva. Es preferible probar primero con el retinol antes del retinal, pero si la piel no tolera el retinol, la alternativa puede ser el bakuchiol, un retinol vegetal que no genera irritación en la piel.

3. El fotoprotector a diario es obligatorio, pero más especialmente si se trata la piel con retinoides ya que esta puede sensibilizarse.

4. Los retinoides deben ir seguidos de una rutina de hidratación puesto que la piel es más propensa a sufrir una deshidratación.

5. La farmacéutica no recomienda combinar el retinol con activos como los alfa o los beta hidroxiácidos.

6. No se recomienda durante el embarazo.