¿Y si ahora que nos quitamos la mascarilla descubrimos que puede ser una aliada para nuestra piel?

Los años de pandemia han conseguido que le prestemos una atención especial al cuidado de la piel y términos como maskné -acné en la zona cubierta por la mascarilla- o maskitis -dermatitis en el tercio inferior del rostro, también como consecuencia del uso de la mascarilla, pero pudiéndose extender más allá de sus límites- son en parte culpables de esta conciencia dermatológica.

La piel que queda cubierta por la mascarilla sobrevive a un microclima con mayor temperatura y humedad que puede hacer proliferar brotes de acné en las pieles grasas o con tendencia. Además, las zonas de contacto directo entre el tejido de la mascarilla pueden sufrir algún tipo de rozadura. Este era el escenario que conocíamos. Pero, tras apuntar todos los aspectos negativos de las mascarillas, TikTok encontraba una nueva utilidad de la (hasta ahora) reglamentaria máscara convirtiéndola en justo todo lo contrario, en una aliada del cuidado de la piel.

A través del ‘mask under mask’, es decir, llevar una mascarilla para el cuidado de la piel bajo la mascarilla higiénica, son varias las marcas cosméticas que han lanzado mascarillas que solo cubren el tercio inferior y quedan escondidas bajo la máscara quirúrgica. Gracias a un sencillo tutorial en el que la tiktoker @glowopedia compartía su rutina de cuidado de la piel cada vez que viajaba en avión, el truco de la mascarilla escondida arrojaba visibilidad sobre el 'mask under mask'.

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La tiktoker explicaba que las propiedades calmantes e hidratantes de su mascarilla se veían intensificadas tras la duración del vuelo. Durante los 45 minutos de su viaje, en vez de resecarse por el ambiente seco de la cabina, su piel se descubría revitalizada bajo la máscara.

Mientras las mascarillas quirúrgicas pueden asfixiar la piel, obstruyendo los poros y favoreciendo la piel de maskné por ese microclima cálido y húmedo -similar al de una sauna-, las mascarillas estéticas se ven beneficiadas de estas condiciones. Uno de los puntos fuertes de las beauty mask, ya sean tipo tissue o biocelulosa, es que mejoran la hidratación y la penetración de los activos gracias a su efecto oclusivo, un proceso que se ve reforzado y protegido por la mascarilla higiénica.

Pero, además de intensificar las propiedades de la mascarilla, el 'mask under mask' también se utiliza para proteger la piel de las propias agresiones de la mascarilla reglamentaria, evitando ese contacto directo. Otra de las claves de su éxito es que permite llevar una mascarilla que resultaría llamativa en el uso cotidiano, fuera de casa, de tal modo que, si queremos darle al área de la boca y la mandíbula un tratamiento más intenso, podemos aprovechar el uso de la máscara. Entran en este rango las lip mask para los labios y su contorno, las mascarillas para la mandíbula y papada o los parches para los surcos nasogenianos.

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Sin embargo, las mascarillas más populares en el 'mask under mask' son las que se extienden por el tercio inferior, encontrando incluso mascarillas especialmente formuladas para cubrir solo la superficie bajo la máscara. Además de su diseño, otra de sus variables es su formulación. Los tratamientos faciales para llevar con la mascarilla se centran en las necesidades habituales de la piel bajo esta, como la irritación -recurriendo a propiedades calmantes- o la sequedad consecuencia del roce del tejido o la temperatura.

El doctor William Schaffner explicaba en 'Insider' que este tipo de mascarilla estética debe ajustarse y ceñirse perfectamente al rostro, para evitar que entre oxígeno, además de impedir que el líquido en que está impregnada moje la máscara superior. La mascarilla Masque BAR Shield & Soothe PPE Facial Hydrogel Mask, con ácido hialurónico, aloe vera y caléndula para conseguir un efecto calmante, hidratante e iluminador es una de esas fórmulas especialmente diseñadas para no rozar la mascarilla ni que la humedad se traspase, como explica Allan Lever, fundador de la marca a la publicación. Otra de sus particularidades es que puede utilizarse tanto en pieles normales, secas, mixtas como grasas.

La alternativa a las mascarillas especialmente diseñadas para llevar bajo la máscara son aquellas que solo se extienden en el tercio inferior del rostro o que forman parte de un pack multifacial, de tal modo que pueden aplicarse por partes, además de los parches para cada zona del rostro. El único inconveniente es haber descubierto este trucazo cuando las mascarillas dejan de ser obligatorias en interiores...

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