Glosario de tendencias capilares de la temporada

El vocabulario generado por la belleza vive en una constante evolución y si nos centramos en el área capilar, más aún. Cada temporada nos sorprende con términos inéditos y vocablos renovados que llegan para nutrir un léxico, cada vez más especializado, destinado a ampliar nuestros conocimientos. Esta temporada no podía ser menos...

Antes de entrar en la materia más trendy, no podemos olvidar que existe un término que lleva tiempo rondando nuestro enfoque de cuidado y cada vez es más frecuente: la skinificación capilar. Como sugiere la traducción literal del concepto, se trata de prestar la atención necesaria a la salud del cabello y trasladar los cuidados de la rutina facial al propio cuero cabelludo. Centrándonos en esta zona, que no deja de ser piel, es importante mantener los cuidados esenciales que disfrutamos en el cutis, como una correcta limpieza e hidratación, con la misión de evitar irritaciones o picores. Pero la clave es ir más allá y también utilizar referencias que controlan el microbioma de la zona, exfoliantes específicos e, incluso, fórmulas 'antiaging' capilares o tratamientos en cabina que tu cutis ya conoce.

Si nos centramos en la tendencia, Eduardo Sánchez, director de Maison Eduardo Sánchez, nos revela que los próximos meses se caracterizarán por un ámbito capilar donde las mujeres apostarán por estilos relajados y naturales, pero sin renunciar a un ápice de modernidad o glamour. El experto afirma que ahí está la clave para definir lo que se avecina a través de “cortes con un marcado acento francés, flequillos cargados y muchas ondas”. Su conclusión es que prevalecen los looks que no requieren demasiado trabajo de peinado y secado para lucir espectaculares.

Cuestión de cortes

Ideas de nuevos looks hay muchas, pero en infinidad de ocasiones se trata de versiones novedosas de las opciones clásicas e infalibles, como son el omnipresente bob o el más arriesgado pixie. Así, entre los cortes que él destaca se encuentran algunos como:

Mixie. Como una evolución del archiconocido corte pixie pero, en palabras del experto, “con los mechones traseros mucho más largos y despeinados en un claro guiño al mullet”. Reconoce que es apto para atrevidas, pero que funciona muy bien con infinidad de tipos de melena, desde lisas u onduladas y hasta rizadas.

Nixie. Nace de la unión de los conceptos 'nearly' (casi) + pixie. A grandes rasgos podemos decir que es como el clásico peinado pero cuando hace tiempo que no se retoca, pues se caracteriza por no tener los laterales y la parte trasera tan cortas. Eso le aporta un extra de frescura y suavidad de plena tendencia.

Bi-Bob. El experto proclama este opción de inspiración francesa como la favorita de las redes sociales. La clave es que va a la altura del medio cuello, o incluso la mandíbula, con una estructura marcada a través de ondas que le aportan un efecto 'messy' ideal. El consejo de Eduardo Sánchez para lograr esa textura es lavarse el pelo un día antes de lucirlo o trabajar las cutículas con champú seco.

Airy Blunt Bob. Esta versión del tradicional bob se caracteriza por ser más despuntada, menos contundente y con un extra de movimiento (se centra en “eliminar el exceso de peso y mantener un elemento de suavidad dentro de las líneas contundentes”).

Micro Bobs. Es la opción más corta del célebre look. Eduardo Sánchez apunta que resulta perfecto para las menos conservadoras, sobre todo en melenas lisas y finas. ¿Lo fundamental? Es que llegue a la altura del pómulo.

Mariposa. Desde la firma capilar Maria Nila reconocen que este corte “consiste en mezclar la longitud de una melena larga con el corte bob, creando de esta forma varias capas en el cabello”. Algunos de sus esenciales es que la capa superior se pueda separar de la inferior como si llevaras un look corto y que vaya acompañado del flequillo cortina. Los expertos identifican que es una gran opción para los cabellos finos que quieren ganar volumen, sin perder longitud.

En términos de coloración

Si nos centramos en los conceptos sobre pigmentos que se han colado (o se van a colar) en nuestra nueva y trendy rutina capilar, Álex Sestelo, estilista y director del Salón Álex Sestelo, insiste en que triunfarán los tonos 'ginger', los tonos rubios con reminiscencias de los 90 (tirando a nacarados) y los castaños brillantes, profundos y naturales. Entre las técnicas que nos van a sorprender este año, el experto destaca cuatro:

Mousy Hair. Se trata de una técnica de coloración que trabaja a partir del tono natural del cabello, mechón a mechón, para aportar los reflejos de luz más idóneos con la finalidad de crear un acabado 100% personalizado.

Golden Brown. El profesional admite que el castaño llega pisando fuerte y esta opción ayuda a matizarlo creando el equilibrio perfecto de diferentes coloraciones como diversos castaños claros, pigmentos miel o algunos rubios.

Face Framing. Estamos ante la evolución del popular 'contouring capilar' y se centra en trabajar con la luz, sobre todo en las zonas más cercanas del rostro, enmarcándolo para lograr un efecto muy favorecedor.

Underlights Blonde. María Roberts, CEO de Studio25, explica que es una opción para actualizar las melenas rubias con algunos puntos oscuros. Es esencial que lleve un fondo interno de castaño, con el efecto de raíz crecida y se trabaje el tono más claro con mechas elaboradas a mano alzada. El objetivo es que “la melena tenga movimiento y no sea un bloque de color, para que tenga más vida y luminosidad", detalla. ¿Un mejor ejemplo? El último look de Edurne.

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