Fórmulas (y trucos) top para mantener el encrespamiento capilar a raya

Que levante la mano quien no se ha sentido alguna vez como Monica Geller en Barbados… Pero tranquila, que no va a hacer falta que te sumes a la moda de las trencitas. Rubén Ramos, especialista de Pantene, admite que el encrespamiento es una reacción física del cabello que se produce cuando está seco, pero "aumenta su superficie para poder absorber más humedad que hay en el ambiente". El experto reconoce que las medidas para evitar el encrespamiento no tienen nada que ver con el corte, pues "el cabello puede estar sano y, a su vez, encresparse, ya que puede estar sano y, a la vez, deshidratado”. La solución pasa por mantener la hidratación y utilizar productos que retengan el agua en las cutículas con el fin de que no se disipe la humedad.

Caroline Greyl, directora de la firma Leonor Greyl, resumen que cuando “el cabello está deshidratado, tiene una cutícula porosa y debilitada que, ante ambientes húmedos, se infla adquiriendo un aspecto encrespado, apagado y descontrolado. Si, por el contrario, “tiene escamas compactas y lisas, su aspecto será brillante y controlado gracias a que las cutículas están en perfecto estado y absorben poca humedad del ambiente”.

“Las melenas más afectadas son las onduladas y rizadas”, sostiene Bely Gallego, experta de la firma de gadgets de cuidado capilar Bellissima. Las consecuencias del temido frizz es que, además de ese aumento sorprendente de volumen, “supone una falta de brillo y que las cutículas estén abiertas. Por lo tanto, esto hace que el pelo tenga una apariencia menos pulida", apunta la experta.

A pesar de que hay pocas melenas que puedan escapar del encrespamiento, todos podemos adoptar diferentes gestos que nos ayuden a evitarlo en la medida de lo posible. Toma nota de los siguientes trucos para minimizarlo…

Presta atención a las fórmulas que aplicas en tu melena

Desde Pantene recomiendan que nada de utilizar productos que contengan alcohol. Respecto al uso de productos de styling, Caroline Greyl aconseja “evitar los que son a base de siliconas, ya que la película que crean alrededor del cabello hace de pantalla e impide que penetren los productos hidratantes, mientras mantienen un efecto oclusivo sobre el cuero cabelludo no permitiendo su oxigenación”.

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Por otro lado, podemos confirmar que los protectores térmicos son un must. Resulta imprescindible proteger a las cutículas de las altas temperaturas, de las herramientas térmicas, así como del sol o del calor del ambiente. Nos encanta Crema de Protección Térmica Coconut Miracle Oil, de Ogx (8,90 euros) que, además, mima las cutículas y retiene la hidratación. ¿Otros imprescindibles? Entre lavados utiliza un aliado hidratante para seguir trabajando las fibras capilares como Sérum Rellenador Elvive Hidra Hialurónico, de L’Oreal Paris (6,99 euros).

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Céntrate en el proceso de lavado

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Sea como sea tu melena (los cabellos finos no son inmunes al frizz, más bien al contrario), alíate con champús y acondicionadores específicos en cada sesión de limpieza y recuerda aplicar cada semana “tratamientos profundos que penetren lentamente e hidraten la fibra capilar”, recuerdan desde Leonor Greyl. Una gran opción es Shampooing Crème Moelle de Bambou, de Leonor Greyl (36,30 euros), pues limpia, nutre, suaviza y aporta un plus de brillo con un 98% de ingredientes naturales. Y, cómo no, las Ampollas Repara 1 Minuto Adiós Frizz, de Pantene (7,99 euros), que están enriquecidas con biotina para proteger tus cutículas frente a la humedad de forma instantánea.

Otro factor esencial es acabar la limpieza capilar con “un aclarado con agua fría, de esta forma conseguiremos que las cutículas se cierren”, sostiene Bely Gallego. Es más, “el agua es un componente perfecto para ayudar a fortalecer el cabello, ya que cuando es fría o templada, cierra los poros y las cutículas, por lo que el pelo se muestra fuerte e hidratado. En cambio, el agua demasiado caliente los abre, lo que debilita las raíces, las riza y acaba en un frizz incontrolable”, recuerda Conchi Fernández, del equipo de To Be Aguilar Delgado.

Importante: ten cuidado con el secado con toalla. Puedes utilizarla pero, en la medida de lo posible, reduce la fricción con el objetivo de que la queratina se mantenga intacta y no se escape la hidratación. Mejor presiona para que la toalla absorba la humedad del cabello o utiliza opciones de microfibra como Hair Turban Antibacterial Copper, de Aquis (29,99 euros), que optimiza el proceso gracias a su tejido técnico.

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Respecto al uso de herramientas de calor…

Rubén Ramos recomienda “evitar la aplicación de los gadgets de calor por la agresión que suponen para el pelo” y el verano es un momento óptimo para reducirlo (las altas temperaturas ayudan en este objetivo). Sin embargo, si no pretendes renunciar a ellas, busca referencias que cuenten con una tecnología específica para minimizar la electricidad estática y el encrespamiento.

Además, nunca optes por la temperatura más alta para aplicarla al cabello y en el caso de los secadores, “es importante que haya una a distancia de unos 20-30 cm entre la fuente de calor y el cabello en sí (utiliza siempre el accesorio difusor)”, sostienen desde Bellissima. Un buen aliado es Air Wonder, de Bellisima (89 euros), que cuenta con ocho cabezales diferentes y distintos modos para personalizar el secado y el peinado, minimizando el frizz.

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