Toques ultrasencillos y de maquillador profesional para una buena cara muy natural

Aunque sobrevuele por nuestras cabezas la probabilidad de que los maquillajes repletos de capas, de acabado mate y antinaturales regresen desde 2015, la realidad es que las pieles naturales y muy jugosas siguen liderando las tendencias de belleza. Ahora que hemos aprendido la lección de que cuidar la piel es lo mejor que podemos hacer para reducir el uso de maquillaje, toca adecuar las rutinas a ese ansiado efecto de belleza natural.

Dice Violette, maquilladora y Directora Creativa de Maquillaje de Guerlain, que ha sacudido el panorama actual, tanto en redes como en el sector cosmético, que lo importante no es cubrir las imperfecciones de nuestro rostro sino realzar sus puntos fuertes. Puede parecer un concepto muy sencillo pero, ¿reparamos en ello?

Gracias a esta reflexión, la experta ha desarrollado una forma de aplicar en el maquillaje con la que se gasta menos producto, se consigue un acabado prácticamente natural, personalizado para cada uno pero, sobre todo, que nos favorece. Es importante incidir en la importancia de que no todo le vale a todo el mundo, algo que aprendimos con las lecciones del contouring que muchos creyeron el perfecto mapeo trasladable a cualquier rostro. Mec, error.

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Maquillaje de día a día

En su lugar, el truco de la maquilladora francesa es actuar primero, y sobre la piel limpia e hidratada, en las zonas que se quieren resaltar y desde ahí, extender la base de maquillaje hacia afuera. Lo ideal es mirarte en un espejo y no pensar ‘tengo unas ojeras horribles’ sino ‘me gustan mis ojos, voy a realzarlos y destacarlos para que sean el centro del look’. En vez de aplicar directamente el maquillaje sobre la piel, se aplica con toquecitos, pudiendo trabajarlo previamente en el dorso de la mano. De este modo, ya estamos reduciendo la cantidad de producto.

Su recomendación es aplicar la base Parure Gold Skin Matte, de acabado aterciopelado pero muy luminosa, “pero aplicada mediante pequeños toques con ayuda de los dedos, buscando un resultado más natural. A la hora de dar color -y un extra de luz-, Terracotta Starligh es la mejor opción. Yo lo extiendo con brocha y en forma de ‘W’ para concentrar el color en las mejillas y la nariz, como si me hubiera besado el sol”.

Aplicar el rubor o los polvos de sol según el ‘W-Blush’ es uno de los trucos que hemos aprendido en los últimos años gracias a las redes sociales y consiste en dibujar la forma de una W sobre el rostro, de modo que el color se deposite sobre mejillas y tabique de la nariz, imitando al efecto con el que nos broncearíamos con los rayos del sol. Para conseguir una luminosidad uniforme en todo el rostro, Violette aprovecha los iluminadores cremosos o en gel para dar un punto de luz sobre arco de cupido, parte alta del pómulo y centro del párpado, de modo que se consiga un brillo homogéneo.

El efecto de Violette en la belleza es el de no tener que cubrir todo el rostro de base de maquillaje, así porque sí. Si hay zonas en las que sí queramos una mayor cobertura, podemos concentrar en ellas los esfuerzos, pero, de nuevo, sin un exceso de producto. Tras haber aplicado la base a toquecitos en las zonas deseadas, con ayuda de una brocha de cerdas cortas, puedes ayudar a que el producto se funda con la piel y no haya diferencias de tono en el rostro.

Maquillaje para eventos especiales

Pero, antes de aplicar la base de maquillaje, preparar la piel es clave, “es fundamental hidratar bien la piel, ya que facilita el posterior maquillaje, que pretende ser de larga duración” aconseja Roberto Siguero, National Makeup Artist de Lancôme, a la hora de elaborar un look para un evento especial en el que queremos que la base dure perfecta y sin cuartearse más tiempo. Además de optar por bases de maquillaje que no solo cubran, sino que cuiden y traten la piel, el experto recomienda aplicar un sérum concentrado en todo el rostro, sin olvidar del tratamiento específico para el contorno de ojos.

Cuando hace unos años descubríamos el paso a paso del maquillaje de Julia Roberts para acudir a los premios Oscar, la sorpresa nos la llevábamos al descubrir que, para conseguir un tratamiento más intenso, la actriz no recurría a su sérum Advanced Génifique, optaba por su versión en mascarilla, cuyo contenido es similar el de un bote del completo del mismo. Así que sí, después de ver la luminosidad de su piel, nos fiamos del consejo de Roberto Siguero.

Tras preparar la piel, el consejo del experto es corregir imperfecciones y ojeras, pero el truco está en contar con un concealer de confianza que cumpla con una doble función, “el corrector se elige siempre en un tono más claro que el de la propia piel, para un efecto de mayor luminosidad”. Sobre estas correcciones, aplicaríamos la base y así conseguiríamos un maquillaje más duradero, pero ni pesado ni artificial.

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Ultraglow, no artificial

Una de las tendencias más divertida y nostálgica del 2022 ha sido la vampire skin, que consiste en recrear la piel repleta de diminutos brillantes de los vampiros de ‘Crepúsculo’. Esa jugosidad adictiva puede, sin embargo, resultar demasiado para el día a día. La solución, en pocos pasos y menos engorrosa, la facilitaba la maquilladora británica Pat MacGrath a la web refinery29.com.

Para recrear la vampire skin y que resulte más natural, en vez de diluir iluminador líquido en la propia base de maquillaje, el truco de la maquilladora es aplicar primero sobre la piel una prebase jugosa que aporte luz como su Divine Skin: Rose 001 The Essence y sobre ella, depositar iluminador líquido o en polvo sobre las zonas en las que incide la luz, para potenciar esa sensación de piel radiante. De este modo nos ahorramos la base de maquillaje, el tono antinatural y el brillo queda mucho menos marcado y puede pasar por simplemente una piel radiantemente hidratada.

Iluminación menos sutil pero adictiva

Si quieres recrear ese brillo efecto filtro de Instagram que haga que todo el mundo alabe tu piel, Charlotte Tilbury es la respuesta. Tanto la mujer como sus productos. Aunque su Beauty Light Wand no entra en el juego, sino que la maquilladora regresa al uso de los iluminadores en polvo, con una nueva textura fundente que se pierde con la piel, el Hollywood Glow Glide Face Architect Highlighter. La magia no está tanto en el producto como en los trucos de la británica para conseguir uno u otro efecto:

¿Quieres unos pómulos altos? Aplica el iluminador desde los pómulos hasta las sienes, “difuminándolo hacia delante y hacia atrás para conseguir un efecto de elevación instantáneo”.

¿Quieres un efecto lifting en la mirada? Pues el truco de Tilbury es aplicar el iluminador en el arco de la ceja pero, cuidado, otra de sus recomendaciones es poner un punto sobre la zona central de la ceja, algo que jamás se nos habría ocurrido.

¿Y para abrir la mirada? Basta con aplicar el iluminador en el lagrimal y en el centro del párpado -truco en el que coincide con Violette-. Otro tip es extender el iluminador a lo largo de la línea de las pestañas inferiores, reforzándolo especialmente en la parte central. De este modo, según explica la maquilladora, los ojos parecen más grandes y brillantes.

Los nuevos usos del rubor de mejillas

Se ha convertido en uno de los trucos de maquillaje que dominarán el 2023 y ya te lo explicaremos más detalladamente en próximos artículos, podríamos denominarlo ‘colorete al estilo Hailey Bieber’, ya que ha sido la influencer y empresaria la que lo ha puesto de moda y consiste en mezclar sobre una superficie, un rubor de mejillas en crema junto a un poco de crema hidratante. La textura cambia, el color se rebaja, la aplicación sobre la piel se simplifica y, lo mejor de todo, el resultado es tan natural que simplemente parece que acabas de sofocarte un poco.

Este año, el maquillaje es natural y va de truco con los que ahorrar mucho producto… Suena bien, ¿verdad?