Manicura con burbujas de esmalte: no es una locura, es la tendencia más mona y chic del 2023

Cuando las mejores cuentas de manicura de Instagram coinciden en crear un tipo de esmaltado, ya puede ponerse una celeb a inventarse un diseño rocambolesco o viralizarse en TikTok un nuevo método para ahorrar esmalte que es oficial: ha nacido una tendencia de nail art.

Justo eso es lo que ha ocurrido con la manicura de gotas, burbujas (bubble nail art), biddie nails o metal fundido (molten metal). Bajo todas estas acepciones encontrarás en la red social manicuras con volumen 3D, no en toda la lámina de la uña sino a modo de una pequeña y más o menos uniforme gota de esmalte concentrada tan solo en una zona.

Fue en 2019 cuando vimos por primera vez este tipo de manicuras. La firma japonesa Adeam trasladaba las -por entonces recién llegadas al maquillaje facial- aplicaciones de perlas a las uñas de sus modelos, apostando por una manicura naíf para la temporada otoño-invierno de 2019.

Sin embargo, la manicura bubble de la que hablamos ahora, cuatro años más tarde, es muy diferente, menos recargada y, lo mejor de todo, no hace falta aplicar una uña postiza o un acrílico para lucirla. Hasta tú mismo puedes hacerte este nail art en casa.

La base de la manicura de burbujas es crear un diseño muy sencillo, poco recargado y sofisticado. Esta descripción podría hacer pensar que se trata de diseños aburridos, pero las 'molten metal nails', como ha acertado en llamarlas la manicurista Betina Goldstein, persiguen todo lo contrario. La idea es poder moldear un diseño con volumen, atrevido y que llame la atención, sin caer en unas uñas saturadas de elementos.

Por así decirlo, es como si se intentara trasladar las piezas decorativas doradas de Schiaparelli al mundo de las uñas. Una superficie lisa, uniforme y de un color prácticamente idéntico al de la base, sobre el que se posa una burbuja transparente, metalizada o dorada.

El color se condensa en un punto de la uña, de tal modo que los diseños de la manicura burbuja siempre son más minimalistas que las uñas llenas de strass. Al crear la pequeña gota con un esmalte de otro color, no solo se reduce la cantidad de laca de uñas que se utiliza -el ahorro es una de las tendencias con más éxito en las redes sociales, no lo olvidemos-, también se aligera el peso sobre la uña.

En otros diseños de nail art en los que hemos visto juego de volúmenes, la uña estaba más expuesta a riesgos como el peso o los enganchones, al utilizar aplicaciones que se adherían sobre la lámina ungueal. Las manicuras acrílicas o las press on nails eran otra opción para crear las manicuras de burbujas antaño, pero esta nueva versión de 2023 simplifica el proceso, el peso y la inversión.

En las bubble nails no hay aristas que se puedan enganchar, ya que la propia gota de esmalte se mezcla con la laca de uñas de la base, de ahí que se cree esa sensación más de burbuja que de gema incrustada. Por supuesto, no hay una norma fija e inalterable de recrear la manicura del momento y podemos encontrar uñas burbuja realizadas con un esmalte distinto al utilizado para pintar la uña, jugando así con el contraste, que la gota sea transparente para crear un diseño espumoso o incluso volver a esmaltar la gota con otro color, para resaltar el volumen.

Sobre la pasarela, para crear diseños mucho más llamativos y también a prueba del ritmo frenético de un backstage, firmas como 16Arlington y Laruicci apostaban por las aplicaciones semiesféricas sobre un esmalte de uñas previo. Contrastes cromáticos y combinación de gemas de diferentes tamaños devolvían creaciones más estrafalarias, alejadas de los diseños vistos en Instagram.

La otra opción eran las socorridas uñas de quita y pon, que permiten crear el diseño previamente sobre una lámina que se pegará a la uña, minutos antes del desfile.

Cómo se hacen

Al ser Betina Goldstein una de las manicuristas que más se han atrevido a experimentar con este tipo de diseños burbujeantes, encontramos en su cuenta de Instagram diferentes versiones, desde las que se quedan en un discreto color transparente hasta las que buscan emular el acero fundido.

La manicurista explica que, para crearlas, primero utiliza el gel de construcción de CND y lo extiende con el pincel Arte 2 de su propia marca de herramientas de nail art, Double Moss. Se trata de un pincel de 8mm para dibujar detalles en las uñas. A continuación, cuando la burbuja está creada y seca, para sellar el diseño y que todo quede homogéneo, aplica una capa del No Wipe Top Coat de Shellac.

De este modo se crearía la burbuja transparente básica, que sería esmaltada de una u otra forma para conseguir el diseño deseado. En el caso del las molten metal nails que Betina Goldstein explicaba en el tutorial, para lograr el acabado metalizado no recurría a un esmalte metalizado tradicional, sino a uno en polvo, en concreto al Mirror Powder de Tammy Taylor Nails. De ahí el efecto ultrabrillante de acero.

Es decir, puedes probar diferentes formas de crear esa gota uniforme y con volumen en tus uñas, desde recurrir al esmalte de uñas tradicional hasta aplicar una gema, pero la recomendación de la profesional para crear una burbuja más robusta y duradera es hacerlo con un gel de construcción.

Y ahora solo queda comenzar a ver las uñas burbuja en las alfombras rojas porque es cuestión de tiempo que todo se llene de bubble nails.