Pinky Cheeks: el colorete rosa que te quitará años de encima

'Emily in Paris' es una americana afincada en la capital francesa tratando de mimetizarse con el entorno: si has visto la serie de Netflix, lo sabes. También sabrás que una de las obsesiones de Emily Cooper es parecer lo más parisina posible, conseguir ese 'je ne sais quoi' tan chic, algo que logra no solo a través de su outfit o su pelo, también de su maquillaje. Lo desvelaba al estrenar la tercera temporada su maquilladora, Aurélie Payen: para que su makeup tuviera una influencia francesa creó unos pómulos rosados, máscara de pestañas potente y bálsamo con color en lugar de un lápiz de labios mate. Otras celebridades le han seguido los pasos: Hailey Bieber, Jennifer Lopez, Priyanka Chopra…

La buena noticia es que han trascendido los imprescindibles de la actriz en la serie, ya que Payen se los ha contado a la revista 'Refinery29', y el colorete de L'Oréal Paris: el cremoso en barra Infalible.

En su justa medida

Pero estarás pensando: “¡Qué mono le queda a ella ese colorete Pinky Cheeks! Me lo pongo yo y es como si me hubieran pegado dos puñetazos”. Para que esto no ocurra, hay que seguir los consejos de un buen profesional. No solo porque el tono debe ser el correcto para ti en función de tu piel y facciones, sino que al tener un acabado tan evidente, la técnica es clave.

Amanda Bell, la Global Make Up Artist de Pixi, cuenta que hay un rosa (que, por cierto, es uno de los colores de la temporada en makeup) para cada una de nosotras. “Si tienes la piel muy clara, funciona muy bien un rosa suave y pastel, un rosa bebé; a medida que el tono se vuelve más oscuro, puedes elegir uno más fuerte y vibrante: para las pieles medias a bronceadas, los favoritos son el rosa coral, el que tira a malva y los más intensos; los cutis más oscuros pueden decantarse por los cereza, fucsia y magenta”. En definitiva, según Miranda Bell, el rosa siempre queda bien, porque da vida a la piel e intensifica el rubor de las mejillas, algo que recuerda a juventud. “Sin un destello de color en los pómulos el maquillaje de labios y ojos puede lucir como descolorido, sin armonía”.

¿La textura favorita para este look aniñado? “En crema queda más natural”, opina la maquilladora, aunque también puedes extender la versión líquida o empolvada y, en este último caso, aplicar encima un iluminador, todo es cuestión de gustos y de tipo de cutis. Una gran ventaja de la tendencia 'pinky cheeks' es que su técnica es bien sencilla: “Empieza por las mejillas y difumina hacia la línea del cabello, en forma de lágrima. También puedes ponerlo en el pómulo e ir difuminando en los bordes”, termina la experta. Un plus: Emily Cooper lleva el mismo rubor de mejillas en los párpados para un resultado fresco y aniñado.

Nos han gustado:

Colorete en stick Infalible, de L'Oréal Paris. Es cremoso, lo tienes en varios tonos y permanece 24 horas inalterable.

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On the Glow Blush, de Pixi (23,99 euros). Este es el tono Fleur, el más empolvado y rosa. Tiene un acabado cremoso y brillante.

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Colorete en polvo compacto de Yves Rocher (16 euros). Tono camelia, tiene un 96% de ingredientes naturales y veganos, es altamente pigmentado pero fácil de difuminar, desmontable y reciclable.

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Couture Blush Fuchsia Stiletto nº8, de YSL (28,97 euros en Primor). Un rosa intenso con pigmentos potentes que proporciona un rubor de larga duración. Tiene textura en polvo.

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Instant Lip Cheek Eye, de Alleven (35 euros). Un tinte 'all in one' que hace las veces de colorete, sombra o labial. Este es el tono rosado.

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Benetint, de Benefit (41,99 euros). El must de los coloretes líquidos que sonroja las mejillas y aporta efecto de labio mordido.

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