Cóctel de máscara de pestañas, el truco para conseguir un efecto más potente y personal

Acumula 1,5 millones de visualizaciones en TikTok, lo que prueba de sobra su efectividad. Sin embargo, el cóctel de máscara de pestañas o ‘mascara cocktailing’, como se ha viralizado en la plataforma, no es más que la perfección de una vieja técnica de maquillaje: el capa sobre capa.

Igual que ocurre con los esmaltes de uñas, cuando extendemos la máscara de pestañas, rara vez dejamos el maquillaje en una capa. Es por ello que muchas incluso ya se amparan en el concepto de ‘resultado modulable’ para explicar que su fórmula permite aplicar más producto capa a capa para modificar la oscuridad, la curvatura, el grosor o la longitud de las pestañas.

El cóctel de máscara se aprovecha de este rutinario gesto de aplicar una capa de máscara de pestañas sobre otra, pero le suma un orden concreto no solo de productos, sino también de gestos. La maquilladora y empresaria Huda Kattan ha contado en alguna ocasión que, para lograr unas pestañas efecto postizas, aplica tres capas de máscara y en cada una se centra en una zona de la pestaña.

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El 'mascara cocktailing' sigue una coreografía parecida, pero se centra en los pasos previos para acondicionar la pestaña y en la combinación de máscaras de pestañas de diferentes propiedades para lograr un resultado de mayor impacto, especialmente centrado en volumen y longitud. Una de las encargadas en viralizar el truco era Jessica Alba, que mostraba su detallada puesta a punto con base y layering de pestañas.

Todo comienza limpiando la pestaña con precisión, tras lo cual se peina la pestaña con cuidado de forma ascendente con ayuda de un goupillón, de este modo, cuando toque aplicar el producto, será mucho más sencilla su distribución y evitaremos que se formen grumitos con la suciedad.

Para que la curvatura no se pierda con las capas de máscara que puedan aportar peso a la pestaña, el siguiente paso es rizarlas. Antes de proceder al maquillaje, se puede aplicar un primer para aumentar la duración y el grosor de la máscara, pero el cóctel de máscaras de pestañas original no siempre lo contempla.

Y llegamos al momento del maquillaje. La idea es adaptar el layering cosmético a las máscaras de pestañas. Si en el layering, a través de capas de productos, amplificamos sus beneficios porque complementamos sus propiedades, como al combinar un sérum de vitamina C con uno con ácido hialurónico o mezclar fragancias, el cóctel de máscara de pestañas aplica una capa de un tipo de máscara e inmediatamente, a continuación, el siguiente.

El orden más repetido es comenzar con una máscara que trabaje sobre la longitud de las pestañas para conseguir una mayor definición y trabajar de raíz a punta y seguir con una máscara de pestañas que se centre en el volumen. De este modo, la primera capa sirve de guía y la segunda aumenta el grosor. De forma individual, una máscara dejaría las pestañas visiblemente más largas, pero finas y separadas, y la otra no permitiría trabajar en la longitud, siendo además probable que aparecieran grumitos.

La doble finalidad del cóctel de pestañas es, por un lado, ahorrar el dinero en máscaras que sean multifunción y así darles salida a las que ya tengamos, pero por el otro también logra crear el efecto pestañas postizas tan demandado en redes sociales. La idea final es crear una pestaña, prácticamente de autor, irrepetible porque “se formula” cada vez que se aplica. Al no darle tiempo a que se seque la primera capa, la segunda queda incluida. Es como condimentar un plato cuando aún está caliente. Por supuesto, las propiedades de cada máscara de pestañas son opcionales y siempre se adaptan a las necesidades y gustos del barman que vaya a agitar la coctelera beauty.