El truco de las influencers para estar morenas en el chiringuito ya no son los polvos de sol
Combinando dos productos de maquillaje, Vicky Martín Berrocal, Chiara Ferragni o María Fernández Rubíes consiguen aparecer aún más morenas sin recurrir a los polvos de sol
¿Muerte a los bronceadores? Podría ser el resumen de los maquillajes que Instagram no para de mostrarnos este verano, aunque siendo honestos el matiz sería algo así como “deja de usar los polvos de sol en verano, pero continúa usándolos el resto del año”. La lección no es en este caso fruto de las declaraciones de prestigiosos maquilladores, ni siquiera es mandato de la pasarela.
Las influencers de todo el mundo parecen haber escondido los bronceadores en stick, los polvos de sol y los autobronceadores faciales a pesar de que sus rostros estén más bronceados que en cualquier otro momento del año. De Chiara Ferragni a Vicky Martín Berrocal, los mismos tips de maquillaje se repiten una y otra vez, creando un maquillaje ‘signature’ del verano 2023. Ya no hay mejillas, frentes ni tabiques morenos, ahora todo es rosa, sin caer, eso sí, en la tendencia ‘barbiecore’.
Jugando con tonos que van del coral al rosa luminoso, el efecto sobre la piel es el de un rostro con un color muy sutil, como besado por el sol, como si apenas los rayos del astro rey hubieran alcanzado los puntos estratégicos unos minutos. El contraste entre la piel y el rubor de base rojiza, que no marrón como los polvos de sol, crea el efecto de un rostro más bronceado.
El mismo truco lo hemos visto en las últimas semanas en María Fernández Rubíes o Vicky Martín Berrocal, entre otras. Rápidos tutoriales a pie de chiringuito compartían el truco de no recurrir ni a la base de maquillaje ni a los polvos de sol. El porqué es sencillo: se trata de maquillajes para pieles que ya están bronceadas.
Ha quedado desterrado el efecto Cheeto que popularizó 'Geordie Shore', en el que sobre una base un par de tonos más oscura se trabajaban capas y capas de polvos bronceadores. En su lugar, las influencers españolas aplican con la misma alegría un colorete rosado.
Mientras Vicky Martín Berrocal recurría a un rubor de tono ligeramente coral y en polvo para conseguir el acabado semimate de la cloud skin, el truco de Fernández-Rubíes era uno de los lanzamientos del verano, el Afterglow Liquid Blush de Nars, en el mítico color Orgasm. El rubor líquido permite un mayor control del producto, pudiendo aumentar su intensidad simplemente aplicando otra capa.
Al tener el rostro completamente bronceado, el efecto del colorete rosa sobre las mejillas y el tabique de la nariz creaba el W blush. De este modo, María realzaba su tono homogéneo, logrando que sus mejillas se vieran pletóricas y que pareciera que el sol le había enrojecido ligeramente el tercio medio del rostro.
Pero Vicky y María no son las únicas que han convertido al rubor rosa en la alternativa más natural y luminosa a los polvos de sol. Cambiando radicalmente de estilo encontramos a Laura Escanes y a Chiara Ferragni, en cuyos maquillajes también hay piel bronceada como consecuencia de las horas al sol y altísimas mejillas rosas.
Chiara Ferragni refuerza la intensidad del colorete con el uso del iluminador en puntos estratégicos como la punta de la nariz o la C de pómulo a ceja, algo que María Fernández Rubíes hace con el Beauty Light Wand de Charlotte Tilbury (eternamente agotado). Pero el otro truco para evitar usar los polvos de sol -no porque sean malos, sino porque a veces recargan mucho el maquillaje y el look de chiringuito pide menos al ya estar la piel bronceada- es replicar el mismo color en los labios.
Vicky Martín Berrocal lo hacía con un labial nude, hidratante pero de acabado mate, que aplicaba a toques y luego difuminaba. Frubíes utilizaba el labial de la misma colección de Nars que su rubor para conseguir un maquillaje monocromático y Escanes y Ferragni recurren al trío del éxito: perfilador, labial y bálsamo.
Para conseguir una boca jugosa de tono nude, Laura Escanes compartía en Instagram el color exacto de su perfilador y labial, ambos en el tono 503 de 3INA. En contraste con la piel muy bronceada de Laura, el nude rosado de sus labios aporta luminosidad al rostro, pero sin que parezca que lleva los labios supermaquillados.
El truco está en que el perfilado -sin overlip- y la barra de labios del relleno son del mismo color y, para homogeneizar el resultado, son cubiertos por una capa de bálsamo labial, como en los gym lips, pero sin romper el arco de cupido.
La cosa cambia un poco cuando hablamos de Chiara Ferragni, cuya intensidad de moreno es algo más tenue que la de las influencers españolas. La italiana ha aprendido a la perfección las lecciones de su maquillador Manuele Mameli y recrea su overlip nude, algo más oscuro, con un labial hidratante, para conseguir la tonalidad cálida de sus mejillas sonrosadas.
Parece mentira que dos gestos tan inocentes como un toque de color rosa en las mejillas replicado en los labios tenga ese efecto sublimador del bronceado, pero ahí están las pruebas. Si cuando te pones morena no sabes cómo maquillarte con tu veraniego nuevo tono de piel, recurre al rosa, al coral o al nude y pasa de broncearte aún más… Palabra de influ.
¿Muerte a los bronceadores? Podría ser el resumen de los maquillajes que Instagram no para de mostrarnos este verano, aunque siendo honestos el matiz sería algo así como “deja de usar los polvos de sol en verano, pero continúa usándolos el resto del año”. La lección no es en este caso fruto de las declaraciones de prestigiosos maquilladores, ni siquiera es mandato de la pasarela.