¿Cómo seleccionar tu nutricosmético? Mesura en medio de píldoras y 'gummies', lo que debes saber

Es cierto que los nutricosméticos no son algo nuevo (desde Kobho Labs reconocen que existen desde mediados del siglo XX, cuando se comenzaron a sintetizar las primeras vitaminas), pero en los últimos años estamos viviendo un auténtico boom… La oferta se ha multiplicado hasta límites insospechados, los formatos se han diversificado para satisfacer a todos los consumidores y es complicado encontrar a alguien que no haya sucumbido a estos aliados que prometen cuidarte desde el interior.

Ante tal popularidad resulta difícil no caer en la tentación de sumarte a la tendencia. Sin embargo, ante un consumidor cada vez más cabal y con ganas de aprender, aparecen infinidad de dudas sobre cómo debe ser el manual de uso y disfrute de estos productos, cuáles son sus limitaciones, si necesitamos un examen médico previo… Hoy preguntamos a profesionales en nutrición las cuestiones más frecuentes que debes hacerte antes de lanzarte al universo de la nutricosmética.

1. ¿Qué es un nutricosmético?

La Dra. Mercedes Sáenz de Santa María, jefa de servicio de Medicina Estética en la Clínica Dermatológica Internacional en colaboración con Luxmetique, nos recuerda que, según la normativa europea, “son productos alimenticios para tomar vía oral, con concentraciones de nutrientes específicos que complementan la dieta y cuyo objetivo es mejorar la salud y el aspecto de piel y sus anejos (pelo y uñas)”. La experta reconoce que cada vez son más populares debido a que no siempre es factible aportar la cantidad necesaria de ciertos nutrientes a través de la dieta.

Desde Kobho Labs indican que algunos de los ingredientes que puedes encontrar en ellos son vitaminas, minerales, aminoácidos, probióticos, enzimas, ácidos grasos esenciales, fibra, extractos de hierbas… Pero es importante recordar que en ningún supuesto sustituyen a una dieta equilibrada.

2. ¿Cuándo es aconsejable tomar un nutricosmético?

En un escenario ideal, la teoría indica que una buena alimentación debería aportar todos los ingredientes necesarios. Sin embargo, la doctora identifica ciertas circunstancias por las que puede que no sea suficiente o momentos con un mayor gasto energético. “Esto puede pasar en épocas de mayor estrés, en dietas restrictivas, durante la menopausia o incluso en algunas estaciones del año (como el otoño, durante el cual el pelo se cae en mayor cantidad)”, sostiene.

La Dra. María José Crispín, médica nutricional de Clínica Menorca, recomienda hacer un examen de conciencia e identificar qué hábitos, más allá de mantener una dieta equilibrada, son los que están provocando que no estés en tu mejor momento, como puede ser evitar tóxicos o apostar por un descanso adecuado.

3. ¿Qué debes hacer antes de lanzarte a tomar un nutricosmético?

Si bien es cierto que a priori no es precisa ninguna prueba médica específica, las doctoras recomiendan que previamente consultes con un especialista, como puede ser un médico o un farmacéutico. “Analizar cada caso concreto y en determinadas circunstancias. Puede ser necesario hacer pruebas como, por ejemplo, en el caso de una alopecia que no responde con nutricosmética o se prolonga en el tiempo”, recuerda la Dra. Sáenz.

4. ¿Qué ingredientes proporcionan los beneficios más buscados?

Desde Clínica Menorca responden que, por supuesto, la clave del éxito de estos productos se encuentra en sus ingredientes. Así, la doctora señala algunos de los que debes buscar en función de tus objetivos:

• Para mejorar la piel: identifica los que contengan colágeno, vitamina A, vitamina D, vitamina E, ácido hialurónico y magnesio.
• Para potenciar el bronceado y reducir las manchas cutáneas: mejor elige aquellos con vitaminas A, D, E y antioxidantes que contrarrestar la oxidación del sol en la tez.
• Para sublimar el cabello: recurre a las vitaminas del grupo B, hierro u otros minerales.
• Para el control de peso: investiga sobre los que incorporan componentes como glucomanano, chitosan, fucus…
• Para reducir la celulitis: selecciona aquellos con ingredientes clásicos como el té verde o el castaño de indias.

5. ¿Un nutricosmético puede tener efectos secundarios?

Las expertas coinciden en que la normativa europea tiene unos estándares de calidad muy altos que aseguran la seguridad si se mantienen las dosis recomendadas. “Pero si se superan esas dosis recomendadas por el fabricante, sí que podría haber efectos secundarios. Sobre todo con vitaminas liposolubles versus las hidrosolubles (son las que si se produce un exceso se eliminan por orina)”, recuerda la Dra. María José Crispín.

6. Si tienes varias necesidades, ¿cómo debes priorizarlas?

En este punto, las expertas abogan por el sentido común. El consejo es empezar por lo que sea más urgente o tener en cuenta el calendario, ya que, por ejemplo, si estamos en mayo es recomendable iniciarse con la fotoprotección oral. La Dra. Sáenz recuerda que “en algunos casos los nutricosméticos son combinables y, de hecho, hay en ocasiones que se potencian. Pero no podemos olvidar que debemos tener cuidado para evitar una sobredosificación de algunos ingredientes”.

7. ¿Dónde debes adquirir tu nutricosmético?

Parece una pregunta de broma, pero la verdad es que resulta esencial acudir a los canales de distribución adecuados, como las farmacias o las clínicas (recuerda evitar las webs poco fiables). Aunque sean seguros, hay una oferta muy amplia donde puedes encontrar referencias de mejor o peor calidad y no siempre es fácil diferenciarlas… En caso de duda, desde Luxmetique recomiendan consultar con un profesional con criterio sobre el tema (farmacéutico o el médico especialista) que te asesore el más adecuado para ti y tus circunstancias.

8. Ante el boom de la nutricosmética, ¿qué formato es el más indicado?

La razón de la gran diversificación de opciones es ofrecer el que mejor se adapte a cada consumidor. La teoría que nos confiesa la Dra. Sáenz es que el producto debería presentarse en el formato que garantice la biodisponibilidad más alta, para que el organismo sea capaz de absorber al máximo los nutrientes. Un inciso de la doctora es que a pesar de que las gominolas se han puesto de moda, a grandes rasgos podemos decir que suelen llevar dosis menores de los ingredientes buscados... ¡Toma nota!