Manual de uso de la diadema de licra: el peinado del street style que oculta el mal pelo

El que avisa no es traidor. Lo que comenzó siendo un look signature que Schiaparelli recuperó de los años 90-2000 y se adjudicó como peinado para hacer resaltar sus joyas doradas es en 2024 la herramienta capilar fashionista del momento.

No hablamos de otra cosa que de la diadema negra de licra. La podrás ver de felpa, de raso o a modo de bandana anudada en la nuca, pero, sea cual sea su material, por quién y cómo la lleva sabrás que es la diadema de moda.

Algunos medios franceses han proclamado que la versión más gruesa y retro sesentera recibe el nombre de ‘bandeau Bardot’, en honor a las anchas diademas que lucía Brigitte Bardot en su esponjosa melena.

Pero la diadema negra a la que nos referimos es otra, es un clásico de la comodidad, de los peligrosos looks ‘sporty’ que corren el vertiginoso riesgo de caer en el ‘chándal con tacones’.

La diadema más cómoda y fácil de encontrar, aquella que de niña te ceñías prácticamente en la frente, está de moda y las calles de París se inundaron de melenas de influencers coronadas con la licra negra.

Justamente, como puede pasar de ser algo de ‘it girl’ a ser un peinado con el que no querrías que nadie te pillara, toca tomar como referencia a Emili Sindlev, Tamara Kalinic o Alessandra Ambrosio como referencia. Eso sí, Bella Hadid la llevó antes.

La primera norma no escrita de la diadema de licra es tener una melena larga. Aunque todo comenzó con un moño bajo y el rostro despejado a lo Schiaparelli, la tendencia ha evolucionado hacia su versión más dosmilera (Y2K). El cabello debe caer a los lados, logrando un contraste entre la zona presionada por la licra y el resto de la melena.

Para que todo quede equilibrado y las dos partes no sean demasiado marcadas, el grosor de esa diadema negra no debe superar los 3 dedos.

A pesar de tratarse de una cinta muy básica, cuando se coloca sobre la melena suelta, ofrece dos opciones. Por un lado, se puede colocar en el nacimiento del cabello, de tal modo que inmediatamente se vea frente, licra negra y melena. Por el otro, se pueden liberar los mechones frontales, aquellos que correspondan al flequillo, las patillas o el degradado frontal. El efecto retro está conseguido.

Otra opción vista en los desfiles parisinos es la de sumar la diadema negra a un semirrecogido. El look es claramente retro años 50-60, marca el volumen en la coronilla y da un toque muy femenino.

Al estilo Blair Waldorf

Una de las sorpresas más gratas y originales del street style nos la daba Alessandra Ambrosio. La top model brasileña jugaba con la tendencia y colocaba sobre su melena una diadema más fina y azul Klein que Blair Waldorf podría haber llevado en su etapa de escaleras del Met.

Lo que Ambrosio hacía era, simplemente, peinar su melena con la raya en medio y colocar la diadema no en el nacimiento del pelo, sino unos centímetros más atrás. Un gesto muy sencillo, pero que, al combinar el color de la diadema con el outfit a cuadros que llevaba, creaba un look ‘Fuera de onda’ perfecto y altamente ‘copiable’.

Tipo bandana

Otra versión de la diadema de licra, pero vista no en los alrededores de los desfiles de moda, sino encima de la pasarela, es la bandana de nailon, transparente y muy tersa. La primera vez que la vimos fue en el desfile de Prada para la temporada primavera-verano 2024, es decir, la que debería marcar las tendencias actuales.

Se trata de un tejido que se coloca sobre el cabello texturizado (entre greasy y efecto mojado) para lograr un peinado entre pulido y 'casual'. Sin embargo, la tendencia ha evolucionado y lo que David Koma o Nina Ricci proponían era una diadema, de nuevo, inspirada en los 2000.

Como si reviviéramos aquella fiebre por la estética pirata, y puede que algo influenciada por el look boho que siempre vuelve puntual en las estaciones cálidas, la idea es combinar la melena suelta con una bandana ancha y negra, ceñida en la línea del pelo, pudiendo dejar libres o no algunos mechones.

Lo mejor de todas las opciones es que se trata de peinados que no requieren ni mucho tiempo ni muchos accesorios. ¿Quién no tiene una diadema de licra por casa? Pues ahora es fashion.