El nuevo papel de Emma Roberts va a ser en el mundo de la belleza, no en el cine

La actriz de 33 años lleva una carrera imparable en el mundo de la interpretación, pese a que ha luchado para quitarse la etiqueta de ‘sobrina de Julia Roberts’. Al contrario que su tía que ha mantenido siempre una imagen a lo largo de su carrera, la actriz ha convertido su imagen en un elemento más de su campaña de publicidad. Ha jugado con ella y se ha sometido a muchísimos cambios de look para demostrar lo camaleónica que puede llegar a ser, ha probado todo tipo de manicuras, maquillajes y cortes de pelo que se han puesto de moda.

Esta versatilidad y esta falta de miedo ante cualquier tendencia beauty ha hecho que alguna marca pose su mirada en ella, y finalmente hay una que ha seducido a la norteamericana y no es precisamente una patria.

Hace unas horas la enseña italiana KIKO Milano revelaba el nombre de su primera embajadora a nivel mundial: la talentosa actriz, productora y empresaria Emma Roberts. La reconocida marca de belleza italiana se une a Roberts en una colaboración global, reconociendo en ella la personificación perfecta de su visión de arte, belleza y alegría. Con su extensa experiencia en la creación de productos de alta gama inspirados en Milán, combinará el estilo distintivo con su ya establecida estética de marca.

Emma Roberts también compartió su emoción: "Estoy encantada de asociarme con KIKO Milano como su nueva embajadora mundial, y unirme a ellos en su viaje para convertirse en la primera marca italiana de belleza a nivel global. Su forma de concebir la belleza es realmente inspiradora y muy creativa, por no hablar de sus exclusivas colaboraciones y ediciones limitadas. Me encanta su misión de ensalzar la confianza de las personas a través del autocuidado. Para mí, eso es la verdadera belleza. La alegría que KIKO Milano aporta con sus productos y servicios a los crecientes (y creativos) fans de la marca es maravillosa. ¿Quién no querría formar parte de todo eso?"

Simone Dominici, CEO de KIKO Milano, expresó su entusiasmo: "Nos emociona trabajar con Emma como embajadora de KIKO Milano ante una audiencia global. Encarna muchos de los valores fundamentales de nuestra marca: es incansablemente creativa y disfruta colaborando con mentes artísticas. Su pasión por experimentar con el color, la textura y el arte es contagiosa. Estamos ansiosos por ver lo que esta colaboración nos deparará en el futuro".

Cuando Emma de muy niña optó por la industria cinematográfica quedó claro que la saga de actores seguía, su padre, Eric Roberts, también lo es, pero ahora Emma se vincula a una marca de belleza, tal y como hizo en su momento con Lancôme, su tía Julia. Por lo que podríamos hablar también de una saga de embajadoras que seguro que darán mucho que hablar.