El peluquero de Jennifer Aniston se ha inventado el corte de pelo que querrás este 2024

Aunque creas que no, a él le conoces de sobra. Se llama Chris McMillan y no solo es el estilista que cinceló la melena midi de Jennifer Aniston en los años 90, también ha sido peluquero de Gwyneth Paltrtow y Brad Pitt e incluso tiene su propia línea de cuidado capilar en colaboración con Drunk Elephant.

Chris McMillan es una de las estrellas más importantes del mundo de los estilistas. Sus cortes de pelo y su forma de moldear el cabello lo acreditan como un erudito de las tenencias.

Es por ello que, cuando compartía el estilismo ‘Bombshell blowout’, la melena voluminosa que estamos viendo en todos los street styles, por fin sabíamos cómo pedirle a nuestro estilista de confianza el corte de pelo que queremos para lo que queda de 2024.

Si durante años, llevar una melena corta, tipo bob en todas sus versiones era sinónimo de ir a la moda, ahora no importa lo largo que lleves tu cabello, siempre y cuando lleves capas y un desfilado frontal.

Las tendencias capilares se caracterizan por cortes de pelo de personalización total en la que cada mechón se adecua a la tipología de pelo y a las facciones de cada persona.

En esta línea, y aprovechando su ventaja durante décadas, la propuesta de Chris McMillan es una melena de largo medio, superando una midi y un clavicut, pero sin llegar a rozar la altura del pecho.

Como en todo buen corte de engrosamiento, las puntas se cortan en recto, de tal modo que se previene que se deterioren y se gana volumen, al conseguir un notable efecto de esponjosidad.

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Para crear el estilismo, McMillan primero corta el perímetro de la melena, en referencia a la longitud, para lo que utiliza una navaja, lo que le da un aspecto más suave y despuntado al final del cabello. Así se consigue el equilibrio entre un corte recto y natural.

A continuación, sección a sección, el peluquero va llevando todos los mechones a la parte frontal para cortarlos de tal forma que las capas se incluyan de una forma orgánica en la melena. Así es como logra ese efecto de rostro enmarcado por capas, pero sin escalones muy marcados.

Un efecto muy concave cut. Todo el proceso de corte comienza siempre con el corte a navaja para que quede mucho más sutil y suave, explica McMillan en sus redes sociales.

Como se trata de un estilismo ‘bombshell’ (puede recordar mucho al clásico peinado de Jennifer Coolidge), el peinado es un paso ineludible y, como la inspiración es muy noventera, el cabello siempre debe ir en liso, con volumen, la raíz levantada y la punta redondeada hacia el interior. Un blowout de libro que el peluquero siempre realiza moldeando mechón a mechón.

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Como detalle final, cuando el bombshell blowout está casi rematado, el truco final para lograr un acabado mucho más pulcro es volver a repetir el corte de las capas frontales, ahora con tijeras, para lograr el perfecto face framing.