“No lo corté, hice que su pelo pareciera corto con una tiara": Sam McKnight, el peluquero que convirtió a Lady Di en un icono de estilo
Aunque han pasado muchas décadas de aquel corte de pelo con el que Lady Di cambió de look y se convirtió en una mujer estilosa, Sam McKnight recuerda vívidamente la sesión de fotos en la que comenzó su transformación
Sam McKnight y Diana de Gales en 1990. (Cortesía Sam McKnight)
Para alguien que proclama que hay que liberarse de la dictadura de TikTok, hablar de tendencias en cortes de pelo es algo sin sentido, “pero es solo mi punto de vista”, precisa Sam McKnight: en una visita exprés a España para presentar algunos de los productos de su marca de cuidado capilar a la venta en ABANUC.
McKnight la convirtió en un icono y todo comenzó en una sesión de fotos con Patrick Demarchelier dándole directrices en ‘franglais’, Lady Di des encorsetándose del protocolo palaciego y Sam haciendo las veces de traductor simultáneo y trilero capilar.
Porque si creías que en aquellas fotos en blanco y negro, con Diana sentada en el suelo entre capas de tul y con una tiara sobre su cabeza, la princesa llevaba el pelo corto, estabas equivocada.
La fotografía que Patrick Demarchelier tomó a Lady Di para Vogue.(Cordon PressPA Wire/Press Association Images)
El día que Diana de Gales se liberó ‘desmelenarse’ o ‘soltarse el pelo’ son las expresiones que solemos utilizar para referirnos a ese momento de relajación y liberación de los corsés sociales. En el caso de Lady Di, su liberación se inició, primero con un peinado con mucho truco y después con un verdadero corte de pelo.
“Todo fuera” le decía la princesa Anne (Audrey Hepburn) al peluquero en ‘Vacaciones en Roma’ y “todo fuera” fue lo que le dijo Sam McKnight a Diana cuando ella le pidió consejo capilar. Pero empecemos por el principio.
El cabello de Diana de Gales antes del corte de pelo. (Gtres)
Todo ocurrió en Londres, en 1990, en una sesión de fotos para Vogue. Detrás de la cámara, el fotógrafo francés Patrick Demarchelier, en la peluquería, Sam McKnight y ante el objetivo la princesa Diana de Gales, Lady Di, a dos años de su sonado divorcio con el, entonces, príncipe Carlos.
“Era la primera vez que trabajábamos juntos”, confiesa McKnight, que recalca lo curioso de la escena, con un fotógrafo al que lo costaba hacerse entender (su inglés afrancesado resultó un problema de comunicación) y una princesa a la que le pedían que se tirara al suelo... La preocupación del estilista, sin embargo, era otra: “su pelo era grande, esponjoso, muy de los 80. Pero estábamos en los 90, y esto era Vogue: ella quería un cambio.”
Diana de Gales en los 80. (Gtres)
La solución fue crear un pelo corto falso. La creación del peluquero consistía en recoger el cabello detrás, de modo que no apareciera en las fotografías, que jugando con los mechones frontales para crear la sensación de que el pelo era corto.
“Le dije: ‘haré que parezca corto sin cortarlo, con una tiara’. Y le encantó". Aquella sesión de fotos tuvo lugar en 1990 y supondría el inicio del despertar de Diana. No solo se convirtió en una de las portadas más famosas de Vogue, también inició la andadura de Lady Di en el mundo de la moda.
Lady Di tras el corte de pelo, en los 90. (Tim Rooke/Shutterstock)
Para el estilista, aquella mítica sesión de fotos fue la primera vez en la que posó de una forma real, que no royal, despreocupada, 'cool', "con una sonrisa realmente natural, la suya".
Al finalizar la sesión, re reprodujo el siguiente diálogo:
Lady Di: ¿Qué harías con mi pelo si te dijera que hicieras lo que quisieras?
Sam McKnight: Bueno, lo cortaría, empezaría de nuevo, me desharía de los 80, entraría en los 90.
Sam McKnight y las fotografías de Diana de Gales en 1990 y 1991. (Vanitatis)
"Yo le presenté a Donatella Versace", explica McKnight, que identificó aquel paso como el inicio de una ola revolucionaria, "la transición toma algo de tiempo, ya sabes". A partir de entonces empezó a vestir de la marca italiana, igual que cambió su forma de peinarse.
Y pasó un año y peluquero y (ahora) modelo volvieron a verse las caras. En esta ocasión sí habría corte de pelo. De aquella sesión, en la que Diana ya tenía un look de los 90 y se había sacudido el volumen crespo de los 80 y los trajes de princesa, su cabello corto -que ahora llamamos Bixie o Wixie- estaba peinado con un wet hair (efecto mojado, ¿hay algo más noventero?)
Para alguien que proclama que hay que liberarse de la dictadura de TikTok, hablar de tendencias en cortes de pelo es algo sin sentido, “pero es solo mi punto de vista”, precisa Sam McKnight: en una visita exprés a España para presentar algunos de los productos de su marca de cuidado capilar a la venta en ABANUC.