Los errores que conviene evitar cuando decoramos un baño pequeño

Coronada como una de las estancias que más nos cuesta decorar, el cuarto de baño o aseo también merece toda nuestra atención. Así, para aprovechar todos los rincones de la casa, sin embargo el baño nos presenta ciertas dificultades, por lo que no es raro que cometamos algunos errores con esta estancia.

Conocerlos es el primer paso para poder evitarlos, especialmente a la hora de decorar un baño pequeño. Por ejemplo, todos sabemos que los colores claros y los tonos neutros son un must, es decir, indispensables en decoración, no es raro que entonces, buscando que la estancia parezca un poco más grande y luminosa, se escoja el color blanco para decorarla por completo.

Esto, que parecía una estupenda idea no siempre trae los resultados esperados, porque nos puede dejar con un baño frío, carente de personalidad. Los colores pueden ayudarnos a evitar esto, ya sea seleccionando un maravilloso papel pintado para colocar en alguna de las paredes, pintándolas de algún color o escogiendo baldosas de otro color algunas de ellas. Los colores verdes, tonos tierra o las diferentes gamas de grises pueden ser una gran idea.

Los azulejos pueden ayudarnos a crear la sensación envolvente y agradable que buscamos en el cuarto de baño, ese rincón en el que relajarnos durante un rato, dedicando un poco de tiempo a cuidarnos. Escoger los mismos azulejos en las paredes y el suelo hará que aumente la sensación de encontrarnos en un espacio abierto. Si esto te parece demasiado uniforme, hacer que una de las paredes sea un poco diferente, por ejemplo añadiendo color con las baldosas, tampoco es mala idea.

Escoger muebles excesivamente voluminosos no es lo más recomendable, sobre todo si, como se ha señalado, la estancia no es demasiado grande. Encontrar el equilibrio entre nuestras necesidades de almacenamiento y el espacio que tenemos disponible es clave para una decoración de éxito, y esto no solo es aplicable al cuarto de baño. Las piezas compactas y los sanitarios suspendidos pueden ayudarte a conseguir un efecto más descargado, aligerando el espacio.

Al no tener demasiado espacio disponible, tendemos al minimalismo, pero esto hace que nos quedemos sin un necesario espacio de almacenamiento al que no es tenemos por qué renunciar. Aprovecha al máximo todos los rincones disponibles para poder tenerlo todo organizado y a tu gusto, unas estanterías verticales pueden hacerte ganar mucho espacio, por no hablar de las cestas y cajas que puedes colocar, sumando estilo a la vez que te soluciona el problema de tener que guardarlo todo.

Tenemos un baño pequeño, ¿ha de ser el espejo pequeño también? Escoge un gran espejo y lograrás que la estancia se vea más grade, uno de los trucos más habituales en decoración porque al reflejar la luz y lo que tiene delante, hace que la habitación parezca mayor. Lo mejor es que el marco no sea demasiado voluminoso y que esté bien iluminado, para evitar que se creen sombras en el reflejo.

Otro de los errores que se suele cometer es no tener en cuenta el espacio que necesitamos para abrir puertas y cajones, en estas ocasiones no es mala idea plantear la posibilidad de seleccionar armarios con puertas correderas, que nos evitarán necesitar esos centímetros extra. No abuses de la decoración, así evitarás tener espacios sobrecargados y, si quieres darle un toque alegre y optimista, apuesta por colocar algunas plantas. Son ideales para llenar de energía positiva el ambiente.