Cómo decorar una habitación infantil con el método Montessori

Comienza el nuevo curso y es el momento de tenerlo todo preparado para que los más pequeños sientan este cambio como un paso adelante y lo afronten con ganas de aprender y crecer. Por eso, nada mejor que hacer algunos cambios en su dormitorio que les ayuden a sentirse un poco más independientes y una forma de conseguirlo es adaptarlos a los consejos del método Montessori.

Hay algunos imprescindibles que no pueden faltar en un dormitorio tradicional y estos mismos muebles también podemos encontrarlos en una habitación Montessori, pero siempre encaminados a conseguir los objetivos que esta experta en educación ha establecido con su sistema, pues pretende que los peques tengan autonomía, aprendan y jueguen y, sobre todo, que se sientan seguros en su propio espacio.

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La cama es el centro de cualquier dormitorio, tiene que resultar cómoda y confortable para proporcionarnos un buen descanso. En el caso de las estancias infantiles esto es igual, pero las Montessori además nos proponen que esta esté lo más cerca del suelo. En contra de lo que puede parecer, no es para evitar caídas, sino para que hasta los más pequeños puedan acceder a ella con facilidad, dotándoles así de autonomía.

En Banak encontramos un ejemplo perfecto de este tipo de camas, la del modelo Jasmy por 270 euros, que además tiene una divertida estructura que ayuda a dotar de personalidad a la estancia.

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Este tipo de decoración aboga por conseguir rincones cargados de serenidad, donde los colores y los materiales adquieren gran importancia. Es el caso de esta estantería de Kenay, que acierta con ambos, proponiendo un ideal soporte para libros en madera y color blanco. En este estante, cuyo precio es de 100 euros, podremos colocar los libros de forma que la portada quede a la vista, ideal para que puedan escoger su próxima lectura con facilidad y con la misma sencillez puedan dejar el libro de nuevo en su lugar.

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Una independencia de movimientos que también consiguen con el armario que recomienda Hannun, Todo queda a su altura, por lo que pueden ser ellos mismos quienes se encarguen de guardar su ropa y también de seleccionarla a la hora de ponérsela.

Del modelo Blai, está diseñado específicamente siguiendo las pautas de Montessori y creado pensando en las proporciones, dimensiones y fuerza de los más pequeños. Tiene un precio de 270 euros, está fabricado de forma artesanal y cuenta con diferentes acabados, desde las maderas más naturales a los blancos más clásicos.

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La habitación se convierte, gracias a Montessori, en el espacio pensado para ellos, en su propio refugio donde pueden jugar y aprender, por eso todos los elementos están pensados para ellos, para que puedan hacer las cosas según sus tiempos y criterios. Contar con una pequeña mesa con sillas, como esta de Ikea del modelo Flisat por 70 euros, hace que puedan organizarse y no necesiten la ayuda de los adultos. Además, esta cuenta con espacio de almacenamiento bajo la tabla de la mesa, para que ordenar sea más sencillo.

Pequeños detalles que podemos incluir para hacer que su dormitorio se adapte a ellos y no al revés, para que tengan su autonomía y puedan sentirse libres desde el principio.

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