Raquel Revuelta: “No me emociona el 'look' de Letizia Ortiz”

La sevillana Raquel Revuelta adquirió notoriedad al ser proclamada en 1989 Mis España. Desde entonces, esta mujer inquieta no ha parado de trabajar, no solo como modelo y presentadora, sino también como empresaria. Regenta desde hace años en su ciudad la agencia de modelos y eventos Doble Erre. Raquel se ha convertido en una verdadera descubridora de nuevos talentos y bellezas. Muchas de las misses andaluzas han recibido sus consejos. Además, esta antigua top es imagen de Telecinco y combina la organización de desfiles con su tarea de ama de casa y madre de tres hijos.

¿Qué piensas del proceso judicial abierto por Telma Ortiz contra la prensa? Me parece que ella está en su derecho de intentar luchar por lo que considera justo. Sin embargo, tiene que aceptar estoicamente la decisión final del recurso.

Se cumplen cuatro años de la boda de Letizia Ortiz, ¿Qué te parece su look? Me parece un look correcto, aunque a mí, personalmente, no me emociona mucho.

¿Qué cambiarias en los certámenes de belleza? En general, los certámenes de Misses se desarrollan de manera acertada. Quizás me gustaría que existiera una mayor implicación de la organización nacional en las preselecciones que se realizan en casa provincia.

Descríbase en dos o tres adjetivos: Vital, alegre, trabajadora.

Qué no le gustaría que dijeran de usted: Algo que no se ajustara a mi realidad o aspectos que sean de mi ámbito privado.

Un momento cinematográfico: La última escena de Blade Runner, cuando el replicante malo muere bajo la lluvia.

El libro que marcó tu vida: La historia interminable. Aprendí a disfrutar con la lectura.

Relee los libros: No suelo hacerlo.

Qué le gusta hacer cuando no trabaja: Disfrutar de mis hijos y mis hobbies.

Si le tocara la bonoloto qué es lo que nunca haría: Continuar con el ritmo acelerado de mi vida.

Y lo que sí: Viajaría mucho más.

Suele poner excusas cuando no tiene ganas de ir a un sitio: Depende de lo diplomática que me sienta ese día.

La bola más increíble –por disparatada- que ha contado: Bolas importantes, ninguna. En todo caso, alguna mentirijilla piadosa.

Un pequeño placer en su profesión: Invitaciones a diferentes lugares a ‘todo plan’ y ‘gastos pagados’.

¿Y fuera de él? Confesable, el mismo, pero con los gastos por cuenta propia.

De no ser lo que es qué le hubiese gustado ser: Pintora, tenista, bailarina…

¿A quién y qué detesta? En general, a los mentirosos, malintencionados y a los vagos. Y a los cobardes que no reconocen y faltan a sus compromisos.

No se quisiera morir sin: Tener la sensación de haber disfrutado de vivir y de que mis hijos van por el mismo camino.

El mejor olor: El de Sevilla en primavera. Me llena de optimismo.

El mejor sabor: El del postre de tarta de limón en ‘Comensal’, mi restaurante.

El mejor sonido: El de las olas del mar en una playa solitaria.

El mejor color: Me gustan varios. Hoy se me antoja el rojo caldera.

¿Qué hacía el día que se casaron los Príncipes de Asturias? Recuerdo que vi un rato la ceremonia. Lamenté el mal tiempo. Pero no recuerdo lo que hice después.

¿Dónde estaba el día que cayeron las Torres Gemelas? En casa, acababa de terminar de almorzar.

La noticia que más ilusión le haría ver en un periódico: Una muy osada y que, hoy por hoy, prefiero reservar.

Y la que más le ha impresionado últimamente: Me impresiono constantemente. La última: el hijo que se pasea con la cabeza de su madre debajo.

¿Suele llorar con las películas? Sí. En general, no me gustan las contenciones, aunque cuido las formas.

¿Cuándo y por qué tuvo un ataque de risa incontrolado? Me río con frecuencia…, recuerdo un ataque de risa en una atracción esta feria con mis hijos.

¿Qué le hace pasar vergüenza? Las provocaciones de ‘mi hombre’.