La señora de Clooney y el nuevo 'power dressing'

Pocos saben que Amal es una de las mejores abogadas expertas en derechos humanos del mundo, que ha sido asesora de Kofi Annan o que entre sus clientes se encuentra Julian Assange. Pero lo que prácticamente todo el planeta sí que sabe es que acaba de casarse con el soltero de oro de Hollywood, George Clooney, y que tiene un armario digno de cualquier celebrity de esas que ocupan páginas y páginas sobre las mejor vestidas del momento. Quizá, le falte demostrar lo que vale sobre una alfombra roja como los Oscar, pero lo que sí es cierto es que es una auténtica experta a la hora de vestir eso que llaman power dressing, es decir, el uniforme que llevan las mujeres poderosas, las que gobiernan el mundo.

De origen libanés y nacionalidad británica, Amal demuestra su independencia y elegancia en prácticamente cualquier ocasión. ¿Cuál ha sido la evolución de su estilo? Según un excompañero de Oxford, "siempre fue guapa, pero no diría que era la más trendy de la universidad. Después, se fue a Nueva York comenzó a ganar dinero y a ir a fiestas, y cuando regresó a Reino Unido ya era de lo más estilosa y elegante". Quizá viene de lejos, pero lo cierto es que el último mes ha sido toda una revelación de estilo y personalidad. Y estas son sus razones.

VIVA LA ALTA COSTURA

Han bastado cuatro días de boda en Venecia y una buena serie de vestidos de diseño y looks de alta costura, desde Oscar de la Renta a Giambattista Valli, McQueen, Dolce & Gabbana o Stella McCartney, para que demuestre su sabiduría en cuestión de moda. Discreta, elegante y ecléctica tanto en la elección de diseñadores como de estilos y colores, Amal ha demostrado que sabe de moda, y que es mucho más que un simple maniquí dispuesta a ponerse cualquier cosa con tal de que tenga un nombre famoso.

EN LA OFICINA IMPECABLE. Y MEJOR, DESCOORDINADA

Lo que demuestra no poca personalidad a la hora de vestir. Con su estilo pulcro y sofisticado, se permite pequeños toques personales, como estas bailarinas de Longchamp descoordinadas. Ella cuida hasta el último detalle de forma incluso obsesiva y su look es realmente irreprochable: ¿en qué bufete de abogados podría desentonar? Eso sí, deja bastante claro que se divierte con la moda. Después de todo, el outfit completo no puede resultar más impecable.

SIMPLE, PERO A COLOR

Es cierto, la abogada parece tener predilección por los tonos claros y los pasteles, pero tampoco le asusta una fuerte apuesta por el color. De hecho, Amal siente auténtica pasión por las líneas limpias y los cortes depurados. De hecho, las prendas que elige siempre son sencillas, incluso simples, pero impecablemente cortadas. Un auténtico icono de estilo sabe vestir en cualquier ocasión, desde una alfombra roja a una cumbre internacional, como con este look superprofesional, de rojo y con zapatos estampados que llevó a la cumbre global contra la violencia sexual en situaciones de conflicto. ¿Un secreto? Amal no tiene problema en repetir bolso…

¿Y DE VIAJE?

Discreción y comodidad ante todo, pero sin renunciar a la elegancia. Falda lápiz y top de inspiración retro para subir al avión. La verdad, no nos extraña que necesite, como mínimo, dos maletas y un neceser. Estar siempre impecable tiene un coste, aunque sea el de pagar el sobrepeso de tu equipaje.

‘CASUAL’, TAMBIÉN

SÍ, la chica también tiene un lado casual y, como a la mayoría de los mortales, le encantan los vaqueros. ¿Un look perfecto para los días que no tienes que ir al despacho ni a los tribunales? Jeans, cazadora de cuero, collar XL y botines, y las calles de Londres para intentar pasar desapercibida. Eso sí que es misión imposible, querida Amal...