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Sin calcetines: cómo enseñar tobillo sin perder la clase
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Sin calcetines: cómo enseñar tobillo sin perder la clase

El pantalón pesquero podría considerarse el (nuevo) escote masculino. El auge de la estética rockabilly sigue vigente otra primavera más. Aquí, las claves para enseñar lo justo

Foto: Cambio y corto. Con vuelta o sin ella, enseñar tobillo con elegancia es posible. (Foto: Pedro del Hierro)
Cambio y corto. Con vuelta o sin ella, enseñar tobillo con elegancia es posible. (Foto: Pedro del Hierro)

Enseñar tobillo es al hombre de nuestros días lo mismo que la barba a los 'hipsters'. Ha pasado de ser una mera tendencia con aromas propios de los rockabilly de los años 50 a convertirse en una premisa más a la hora de vestirse. Surgió hace más de tres años bajo el nombre de 'pinrolling'. Entonces, remangar el bajo del pantalón ya contaba con la bendición de las firmas de moda internacionales. Durante el verano de 2016, el concepto derivó en pantalones con patrón 'cropped'. Es decir, venían con los bajos cortos de serie. Hasta hoy. Cuando a estas dos modas se le suman otras dos acepciones con motivo del auge de la apariencia 'jogger' o 'athleisure'.

Cada pantalón tiene sus propios códigos a la hora de remangarlos. Por ejemplo, un chino permite un par de vueltas más anchas que las de un vaquero de patrón 'slim' o 'skinny'. En modelos como estos, lo recomendable es que estas no superen el centímetro y medio ya que, de lo contrario, puede generar un efecto visual de piernas cortas. Sea como fuere, lo cierto es que el tobillo masculino se ha convertido inexorablemente en el escote femenino. Y se lleva sin calcetines (o con 'pinkis'). A continuación, una guía ilustrada sobre cómo apuntarse a la tendencia 'mankle' dependiendo de la prenda que elijas sin perder la elegancia.

Con vaquero

El espectro de vaqueros con vuelta resulta tan amplio como los modelos que existen en el mercado esta temporada. Como de lo que se trata es de ir sin calcetines, esta prenda necesita de un calzado que esté a la altura: desde unas zapatillas hasta llegar a unos zapatos derby pasando por unos mocasines de ante. ¿El color ideal? Aquel que se complemente a la perfección con el tono del pantalón: blancos, azules y tostados se convierten en una opción idónea.

Camisa modelo Fulham de Hackett (145 euros); pantalón de Levi's Red Tab Men (110 euros); cinturón trenzado de Stradivarius Man (7,95 euros); gafas de sol modelo Bonanova de Etnia Barcelona (209 euros); y mocasín sport de Zara (39,95 euros).

Con chino

En algodón, en sarga o, por qué no, en lino. Da igual el tejido, lo importante es el patrón del pantalón. En el caso del chino, caben muchas opciones. Tantas como los colores que adquieren protagonismo esta primavera: desde los azules marino hasta llegar a los verdes, pasando por los colores nude o tierra. Todo vale siempre que sus versiones con vuelta o en versión 'cropped' estén rematadas con zapatos de ante, zapatillas blancas o, por qué no, náuticos. La inspiración de aires mediterráneos se combina así.

Jersey estilo polo con detalle de rayas de Massimo Dutti (29,95 euros); pantalón chino modelo Jean Cut de Dockers (109 euros); cinturón de cuero de Olimpo (65 euros); gafas de sol de Lacoste by Marchon (155 euros); y zapato náutico de A.P.C. (345 euros) disponible en Mrporter.com

Con jogger

Antes de decidirse por el uso de este pantalón, la primera premisa ha de quedar clara: solo se pueden llevar con zapatillas blancas. La segunda está en optar por un jogger en colores neutros que deriven en una combinación limpia y sencilla. Camisas en tejidos como el lino y complementos en clave minimalista harán el resto. Estos modelos exigen enseñar el tobillo porque sí y acogerse al menos es más se convertirán en la opción ganadora sin que parezca que acabas de salir del gimnasio.

Camisa modelo Kodak de Mango (19,99 euros); pantalón de popelín estilo jogging de Massimo Dutti (39,95 euros); cinturón modelo Bohemian de Scalpers (59 euros); reloj de acero inoxidable de Lotus (99 euros); zapatillas con picados de Stradivarius Man (29,95 euros).

Con traje

En los trajes de inspiración italiana está la clave. A pesar de que los caballeros más puristas rehusarían lucirlo con mocasines y sin calcetines, lo cierto es que el 'stile' permite que se relajen los códigos de vestimenta clásicos ahora que aumentan las temperaturas. Para enseñar tobillo con corrección, la opción más recomendable es utilizar un pantalón cuyo bajo lleve la vuelta cosida de serie. De esta forma, es posible combinarlo con camisetas y zapatillas o, en su defecto, con corbata y maletín. En la mesura reside el éxito.


Traje de rayas grises modelo Napoli de Suitsupply (279 euros); camisa modelo Care de Zara (19,95 euros); corbata estampada de Asaia (307 euros) y disponible en Farfetch.com; maletín modelo Saffiano de Sandro (345 euros); y zapato modelo Sartoria de Hugo Boss (525 euros).

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Enseñar tobillo es al hombre de nuestros días lo mismo que la barba a los 'hipsters'. Ha pasado de ser una mera tendencia con aromas propios de los rockabilly de los años 50 a convertirse en una premisa más a la hora de vestirse. Surgió hace más de tres años bajo el nombre de 'pinrolling'. Entonces, remangar el bajo del pantalón ya contaba con la bendición de las firmas de moda internacionales. Durante el verano de 2016, el concepto derivó en pantalones con patrón 'cropped'. Es decir, venían con los bajos cortos de serie. Hasta hoy. Cuando a estas dos modas se le suman otras dos acepciones con motivo del auge de la apariencia 'jogger' o 'athleisure'.

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