¿Boda o funeral? Todos los invitados eligen el negro en la boda de Marta Ortega

Por fin comenzamos a ver los primeros looks elegidos por los invitados a la boda de Marta Ortega y Carlos Torretta y hemos sacado nuestras primeras conclusiones: el negro es el color del día. Todos y cada uno de los asistentes han optado por este tono entre clásico, elegante y supersocorrido, creando un efecto inesperado: dar a entender que más que a una boda están asistiendo a un funeral (estilísticamente hablando). Está claro que en esta boda había un dress code encubierto del que nos estamos enterando ahora.

Vale, esta es la situación: es viernes de otoño (fecha inusual para una boda), estamos en una boda de día y, sí, es la segunda boda de la hija de Amancio Ortega, por lo que los vestidos largos, las pedrerías y los colores vibrantes quedan totalmente descartados. De ahí que el negro, como ese clásico que nunca falla y que es un básico en cualquier fondo de armario, se erija como el favorito por los invitados.

Pero también hay que decirlo, aunque las normas de vestimenta en las bodas han ido evolucionando con el paso de los años, el negro siempre ha sido un color susceptible a críticas, malos entendidos estéticos y reservado solo para los enlaces nocturnos, hecho que evidentemente en esta boda no ha sucedido. Desde familiares a amigos de los novios sin importar la edad o el estilo de cada uno, en esta boda todos dicen sí al negro. De ahí a pensar que más que una celebración del amor y la felicidad estamos ante un funeral hay una línea muy pero que muy ligera. El efecto negro tiñe un sinfín de looks, mira.

¿Algunos de esos nombres? Carmen Echevarría, la madre del novio, con vestido minimal en negro. La tía de la novia, María Luisa Ortega, por supuesto, con abrigo negro. Y muchas más invitadas luciendo el color negro por bandera para la tan esperada boda de Marta Ortega y Carlos Torretta.

Está claro que estamos frente a una segunda boda y, como no podía ser de otra forma, los estilismos son más recatados e inusuales de los que podríamos esperar para un enlace de moda a lo grande como debería ser el de esta pareja, pero de boda a funeral hay mucha distancia.