Así intentan las firmas low cost acercarse al lujo

Las firmas asequibles cada vez toman con más frecuencia nota de los movimientos de las marcas de lujo para lograr que su estrategia y su estética sean lo más sofisticadas posible. No solo se trata de encontrar en sus perchas diseños que se inspiren en las de los reyes del lujo, sino de que su universo pueda verse reflejado en cierto modo en el espejo que las grandes marcas ofrecen.

Por supuesto, son los portales online de las marcas low cost los que se intentan aproximar cada vez más a los de arriba. Cuando Mulaya lanzó su página web, todos señalaban que su inspiración la había encontrado claramente en Zara, y lo

cierto es que su portal sorprendía por su estética cuidada. A su vez, cuando la estrella de Inditex ha lanzado su línea SRPLS compuesta por prendas de estética militar, ha aprovechado para que su web ofrezca una nueva imagen que recuerda a la de Balenciaga. Las imágenes de toda la colección podían verse de una sola vez en una disposición no solo similar a la de los catálogos de papel, sino sobre todo a la de la marca de Demna Gvasalia.

La colección fue dada a conocer dentro del marco de la Semana de la Moda de París en el barrio de Le Marais, en el que de nuevo Balenciaga y otras marcas como Hermès presentan sus propuestas. Lo de que las firmas low cost presenten sus diseños en desfiles con los que demostrar su fuerza no es nuevo en la industria de la moda. Los desfiles de Massimo Dutti en Barcelona y los shows en los que H&M presenta sus colaboraciones, como ha ocurrido recientemente en Roma con la esperada colaboración de H&M y Giambattista Valli, dejan claro que las estrategias del lujo se hacen ahora extensibles al resto de marcas.

H&M ha decidido cambiar las macrotiendas por boutiques con las que asemejarse a las marcas de lujo. La firma sueca ha experimentado esta nueva fórmula (que inició el año pasado en Estocolmo) al abrir en uno de los barrios de moda de Berlín una boutique que ofrece clases de yoga, cuenta con espacio para otras firmas y con un jardín con cafetería. Esta boutique ocupa la quinta parte de sus tiendas habituales.

Su ropa se adapta a los gustos locales y no solo cuenta con productos de belleza, sino con diseños de segunda mano de marcas asociadas. Habrá también una herramienta digital en la que ver las prendas de H&M y en la que los consumidores podrán construir sus looks o recurrir al asesoramiento de un estilista. El objetivo de esta innovación no es únicamente mejorar las ventas, sino ofrecer a sus clientes unos servicios cercanos y mejorados que les muevan, si no es a comprar sus prendas en tienda, a revisitar y adquirir los diseños deseados en la web del titán sueco gracias a una nueva relación más sofisticada.