Julia Roberts protagoniza la alfombra roja más espectacular que has visto este año

Julia Roberts se ha convertido en la protagonista indiscutible de los British Fashion Awards, unos premios que durante dos años consecutivos han reconocido a Virgil Abloh su labor a la hora de redefinir el lujo al ser galardonado con el Urban Luxe, que celebra la innovación y la influencia de una marca. No te pierdas lo mejor y lo peor de la alfombra roja de estos galardones.

Rihanna ha ganado el premio más esperado de la gala gracias a su firma Fenty, que ahora se encuentra bajo el paraguas de LVMH.

El look de Fenty de la cantante no nos ha convencido, pero tenemos que aclarar, una vez más, que quizás estamos ya mayores para estas cosas.

Cate Blanchett ha sido una de las mejores vestidas de la noche gracias a su vestido de la colección de alta costura invierno 2019 de Armani Privé.

Este vestido de Amber Valetta lo firma Stella McCartney y nos fascina. Sin embargo, ¿se nos permite un breve apunte?

Nos recuerda muchísimo al look de Maribel Verdú en 'Superlópez'.

Alexa Chung acierta con este diseño modo Miércoles, de la Familia Addams, de su propia firma.

El vestido de Attico de Emma Roberts, que combina con zapatos de Jimmy Choo y joyas de Bvlgari, nos maravilla.

¿Puede sentarle mejor este vestido de Vivienne Westwood a Jourdan Dunn? La pregunta era retórica.

Si el personaje que interpreta Jim Carrey en 'Batman Forever' asistiera a una entrega de premios, posiblemente acudiría con este look de 16Arlington hecho a medida para Rita Ora.

Pues eso.

Poppy Delenvingne se convierte en un cisne con su minivestido de tul blanco.

El look de Christopher Kane de Kylie Minogue nos espanta un poco. Podríamos haberlo suavizado, pero hemos preferido optar por la sinceridad.

Suponemos que esto es lo que ocurre cuando vas a una tienda de disfraces a por un vestido de fiesta y te peleas con un tigre: que acabas con un look parecido al de Bella Thorne.

El vestido de Vivienne Westwood de Winnie Harlow parece que también se peleó con un felino de grandes dimensiones.

Creemos que el cometido de Elsa Hosk en la vida es recordarnos que estas navidades nos alejemos de los polvorones y que pensemos en ella cada vez que nos sentemos y nuestra tripa lo haga con nosotros. Su dos piezas de Celia Krithariot sería nuestra peor pesadilla, pero a ella le sienta de miedo.

Nos ha costado mucho tiempo escribir Emily Ratajkowski sin tener que buscarlo en Google, y ahora que lo hemos conseguido, llega Shailene para convertirse en la celebrity cuyo nombre siempre tenemos que chequear dos veces. Su look de Moncler, en realidad, nos encanta, porque parece uno de esos memes que indican que nos pasaríamos el invierno con el edredón encima, pero tenemos que reconocer a la vez que es un poquito cuadro.

Donatella Versace se convirtió en la 'woman in pink' de la velada con un entalladísimo vestido de tejido y corte sirena, muy eléctrico. El estrecho escote halter realzado con bordados acentuaba más la contorneada figura de la diseñadora. Too much, Donna.

Irina Shayk suele ser una habitual de la lista de las mejor vestidas, pero de vez en cuando patina, aunque su percha disimule el descalabro. En este vestido de Riccardo Tisci para Burberry gris topo, de abertura reglamentaria y pronunciado escote en V, tenemos dos peros: uno es el color, que ni el eterno bronceado de la modelo rusa logra salvar, y el otro son los adornos del escote a los que, sinceramente, no encontramos explicación.

Convertida en diosa dorada, Rosie Huntington-Whiteley acertó como siempre con este diseño de Bottega Veneta solo apto para una top model de su talla. Los accesorios a juego, dorados y plateados, combinaban con el tejido de rejilla que jugaba con las luces de los focos.

Amamos a Jon Kortajarena, pero la mezcla de estilos entre el cowboy, los sleepers y la chaqueta bordada no terminaba de generar un match completo. Aunque el total look de Etro, con tuxedo, chaqueta bordada y loafers de terciopelo estaba hecho a medida para el modelo, algún detalle nos sobraba. Puede que el detalle de la camisa fuera el culpable.

La diosa de ébano también se equivoca. Enrejada en un vestido de Alexander MacQueen de gasa con incrustaciones y bordados plateados no terminaba de sacar el potencial de Naomi Campbell. Mientras el cuerpo del vestido era un enramado de bordados florales que ocultaban estratégicamente los atributos de la modelo, la falda jugaba con sinuosas transparencias dejando las piernas a la vista. La incorporación de una melena XXL con claros postizos le hizo un flaco favor.