Los mangas supersize van a ser el must

Puede que los Globos de Oro de este año no hayan sido tan políticamente activos como los de hace dos, pero no dejes que la colorida alfombra roja nuble el mensaje que muchos detalles presentes en los looks de las celebridades intentaban mandar. Las grandes reinas de la noche fueron las mangas supersize, con hombreras maxi destinadas a dar un giro al womanspreading que fue la tendencia indiscutible en las alfombras rojas el 2019.

Este tipo de mangas vuelven a reclamar ocupar espacio en la alfombra roja y se convierten de nuevo en un detalle fashionista que sin duda alguna no proviene de la mirada masculina. Frente al aluvión de naked dresses y escotes imposibles, los Globos de Oro han apostado por las mangas abullonadas y hombreras XL.

Beyoncé llegó una hora tarde a la gala, porque para algo es Beyoncé, y lo hizo enfundada en un vestido custom-made de Schiaparelli que encaja a la perfección dentro de esta tendencia. Por su parte, la galardonada Olivia Coleman apostó por un vestido rojo de Emilia Wickstead cuyas mangas recuerdan a las de Enrique VIII.

Incluso uno de los modelos más escotados de la noche, el mono de Fendi amarillo de Zoey Deutch, contaba con hombreras puntiagudas que venían a mandar el mismo mensaje que las de sus compañeras y con mangas abullonadas que iban ganando volumen hasta alcanzar una silueta maxi al llegar a la muñeca.

En el apartado de los vestidos que siguen la estela del 'womanspreading' por sus siluetas evasé exageradas, podemos incluir el vestido verde de Jodie Comer, que firma Mary Katrantzou. Se trata de un diseño que también cuenta con las hombreras exageradas que reinaron en la noche, por lo que fue uno de los diseños más comentados al multiplicar el volumen por dos.

Los bolsillos también estuvieron presentes gracias a Margot Robbie y Ana de Armas, que confiaron en la comodidad que aportan a los vestidos. En resumidas cuentas, el feminismo, aunque de forma sutil, estuvo presente en la alfombra roja de los Globos de Oro. Pronto veremos si los premios han asentado las bases de cómo serán las alfombras rojas este 2020 o si el aura política ha sido cosa de una noche y no la combativa tónica general del año.