Cuál será el futuro de las firmas británicas y el de Meghan en la moda tras el Megxit

Tras la emisión del deseo de los duques de Sussex de desligarse de la familia real británica, Inglaterra y el mundo se preguntan cuáles serán los efectos que este singular acontecimiento traerá consigo para la moda inglesa y cuál será el devenir de Meghan en la moda. Hemos de tener en cuenta que la empresa Brand Finance estima que la boda de los duques de Sussex generó 1 billón de euros en 2018 para la economía británica, una cifra a la que le hemos de sumar los 300 millones de libras que los turistas desembolsaron en viajes y alojamiento y los 50 billones de libras gastadas en merchandising.

El que Meghan Markle desde entonces haya lucido looks de firmas como Marks & Spencer (con la que ya ha lanzado su propia colección) ha hecho que las marcas inglesas hayan visto sus ventas aumentar gracias al efecto Meghan, pero la moda inglesa no ha de temer este nuevo paso. Es indudable que Markle continuará siendo el centro de todas las miradas, y mientras que sus looks seguirán siendo los más analizados y deseados, nada anuncia que no siga apostando por marcas inglesas que cumplan con el requisito indispensable que el armario de Meghan impone: sostenibilidad.

El siguiente paso lógico es que la exactriz aproveche sus impecables relaciones con las marcas de moda para lanzar proyectos relacionados con la industria, y ya se asegura que Markle está inmersa en negociaciones con diversas firmas de moda. “Meghan está muy bien relacionada en el mundo de las tendencias y hay muchas marcas de renombre que querrían colaborar con ella en diversos proyectos”, cuenta una fuente a ‘The Sun’. “Ya ha hablado con Givenchy. Estos negocios podrían brindarle millones de dólares”, concluye.

Teniendo en cuenta que desde junio los duques de Sussex ya cuentan con su propia marca, Sussex Royal, no sería de extrañar que Meghan Markle se atreviera tras colaborar con diversas firmas a lanzar su propia línea de ropa y complementos. Tampoco sería de extrañar que Meghan se adentrara en una carrera similar a la de Gwyneth Paltrow, es decir, que probara suerte dentro del campo del estilo de vida. Antes disfrutaba compartiendo tips foodie y sus restaurantes preferidos en sus redes sociales y en su blog 'The Tig', por lo que quizás se atreva ahora a lanzar una marca lifestyle en la que también tengan cabida sus entrenamientos, sus rituales de belleza y sus recetas fetiche.

No hay que olvidar que la mejor amiga de Meghan es Jessica Mulroney, la estilista que se comenta puede haber hecho a Markle desear otro tipo de vida. Cuenta con su propio show televisivo, aparece en programas matutinos de la televisión americana y ha creado su marca. Haga lo que haga Meghan, Jessica se convertirá sin lugar a dudas en su mejor asesora. Incluso se asegura que Meghan podría haber contratado al gurú de las redes sociales David Watkins, que ha trabajado para marcas como Apple y Burberry, para gestionar la imagen de la pareja.

En definitiva, la economía británica tiene en realidad mucho más que temer al Megxit que la cuenta corriente de los duques de Sussex.