Penélope Cruz, reina de la alfombra roja de los Goya: arriesgando y sin Chanel

Penélope Cruz era una de las más esperadas sobre la alfombra roja. En primer lugar, porque podría alzarse con el Goya esperado, y en segundo, por la expectación creada entorno al diseño que luciría en la que podría ser su gran noche.

La de Alcobendas no decepcionó y sorprendió con un diseño que se sale completamente de su zona de confort. Estampado de flores (ella suele llevar colores lisos) y con un corte princesa de lo más etéreo, Penélope, sin lugar a dudas, se convirtió en la auténtica reina de la alfombra roja.

Vestidazo de Ralph and Russo

Firmado por Ralph and Russo en lugar de por Chanel, la firma de la que es embajadora y que ha firmado sus looks del último año, arrasó del brazo de su amigo Pedro Almodóvar al que ha confesado que podría entregarle el Oscar dentro de unos días.

Ha lucido un vestido de organza de seda con estampado floral rosa y verde, con un corpiño de tul de ilusión adornado a mano con hilos de seda, motivos florales recortados, cristales de rosalina, xiliones de ópalo pacífico y hojas con cuentas 3D, enriquecidas con volantes de organza de seda plisada blanca y menta aplicados en un diseño en cascada. Una maravilla.

[LEER MÁS: Gregoria Stylist: la actriz detrás del pseudónimo que ahora viste a Penélope Cruz]

En un desliz fruto de los nervios de la noche, se le escapó que volverá a entregar el Oscar a Mejor Película de habla no inglesa. ¿Volveremos a vivir el momento Peeeeedro?

Por lo pronto podemos seguir analizando el look de esta noche malagueña que perfectamente podría haber salido de la elegante mente de su íntima Goya Toledo, ahora reconvertida en su estilista de cabecera.

Detalles beauty

El otro punto que nos ha fascinado de su elección ha sido el plano beauty: Penélope se ha decantado por un maquillaje con una piel muy limpia con bastante iluminador, labios nude pero muy trabajados, cejas naturales y un delineado cat eye rematado con unas pestañas de infarto. En cuanto al peinado, se decantó por un moño relajado con mechones sueltos que se ha convertido en su mejor aliado en las grandes citas.

Sencillamente, espectacular.