De modelos con mascarilla a drops: así comunican ahora las marcas a sus seguidores
Descubre las claves de las nuevas campañas de las firmas de moda, que han tenido que cambiar sus estrategias para poder vender durante la pandemia
Lo que en un principio parecía una excepción se está convirtiendo poco a poco en aquello a lo que ahora llamamos la nueva normalidad, una situación excepcional en la que las marcas no pueden ya fotografiar a sus modelos en plena Quinta Avenida, en una playa paradisiaca ni en una glamourosa fiesta. Las firmas se han visto obligadas a comunicar constantemente a sus seguidores que la comodidad es la clave y por ello apuestan en sus campañas virtuales por sesiones de fotos 'homemade' en las que el salón de la casa de las modelos se ha convertido en la nueva pasarela.
¿Cómo pueden las marcas de moda continuar vendiendo tendencias y sueños cuando no podemos salir a la calle y llevar algo que no sea un chándal carece de sentido? ¿Cómo se adaptan las firmas a la nueva normalidad sin parecer alejadas de la realidad? Bershka ha decidido seguir promocionando sus diseños haciendo de las mascarillas el hilo conductor.
La marca no las vende (algo que sí están haciendo firmas como Eduardo Navarrete, cuyos divertidos diseños se están convirtiendo en una revolución en redes sociales), pero gracias a su nueva campaña, cuyo enclave es un sencillo espacio en blanco, manda un claro mensaje: la mascarilla es ya parte de nuestra nueva realidad y hemos de adaptarnos y acostumbrarnos a ella.
Rihanna quiere que sigamos soñando, y nada mejor que posar en lencería para que sus seguidores lo hagan. La cantante ha querido que su firma Savage x Fenty siga apostando por la sensualidad y ha decidido hacerlo creyendo en el poder de las redes sociales. Para ello, cada mes ha contratado a diferentes influencers para que así promocionen sus diseños, logrando de esta forma una jugada maestra: una difusión notable, una apuesta continuada por la diversidad que funciona como base de la marca y la posibilidad de continuar mostrando novedades sin salir de casa.
Mientras tanto, Valentino ha contado con celebridades de la talla de Gwyneth Paltrow, Naomi Campbell y Laura Dern para ejercer de modelos de forma gratuita en la campaña #ValentinoEmpathy, cuyo objetivo es ayudar económicamente a las investigaciones para terminar con el coronavirus. Jacquemus ha preferido optar por la sensualidad y apostar por Bella Hadid y por Rosalía para que promocionen sus productos desde sus hogares, convirtiéndose así en las musas de su nueva campaña.
Sin embargo, teniendo en cuenta que la generación Z representará el 40% de las compras de lujo en 2035, hay que tener en cuenta que el 75% de sus miembros, según la encuesta llevada a cabo por DoSomething en marzo, quiere ver de las marcas a las que siguen no sus novedades, sino cómo abogan por la seguridad de sus empleados y de sus compradores. Por ello, lo fundamental para que se mantengan a flote es, ante todo, no intentar aprovecharse de la situación y apostar por la humanidad.
Lo que en un principio parecía una excepción se está convirtiendo poco a poco en aquello a lo que ahora llamamos la nueva normalidad, una situación excepcional en la que las marcas no pueden ya fotografiar a sus modelos en plena Quinta Avenida, en una playa paradisiaca ni en una glamourosa fiesta. Las firmas se han visto obligadas a comunicar constantemente a sus seguidores que la comodidad es la clave y por ello apuestan en sus campañas virtuales por sesiones de fotos 'homemade' en las que el salón de la casa de las modelos se ha convertido en la nueva pasarela.