Del vichy al tartán, las influencers dicen que los cuadros son para el verano
No lo dudes más: llevar cuadros (también en verano) está de moda. Y con ese dictado de las insiders, solo te queda caer rendida ante ellos
Cuando pensamos en un armario de verano y en los típicos estampados que lo componen, las flores, los lunares o los prints tropicales afloran en nuestra mente de manera natural, pero como la moda es así y no quiere ceñirse a convencionalismos, este 2020 ha tomado prestado un estampado clásico del invierno, uno que ha trasformado y adaptado hasta tal punto que es casi imposible no querer lucirlo durante los próximos meses.
Hablamos de los cuadros, de todos, desde el reducido y afrancesado vichy, hasta el grandioso e inglés tartán, que este verano y gracias a las insiders han experimentado un acertado lavado de cara y, ahora sí, son aptos e idóneos para llevar bajo el sol.
Manteniendo a raya esa geometría perfecta de la que hacen gala siempre los cuadros, la gran revolución en su imagen se produce con una explosión de color nunca vista y sin precedentes en este print que ha logrado cautivar a las prescriptoras de moda más exigentes.
Colores vibrantes, fluorescentes y la gama de los pasteles, en definitiva, cualquier color llamativo de la paleta cromática subido de tono que irradie esa imagen estival que piden nuestros looks de verano y que este año lograremos gracias a los cuadros.
Reinar entre las insiders e imponerse como su estampado predilecto no ha sido nada fácil. Los cuadros han tenido nuevos competidores que peleaban por ese puesto como los prints frutales o el efecto tie-dye, pero han conseguido salirse con la suya y hoy protagonizan el street style.
Del apetecible y tan estival vichy, esos diminutos cuadros bicolores que vemos tanto en Instagram y que permiten ser combinados con otros de su misma tipología, hasta los cuadros más grandes, los XL, que dejan de lado los clásicos colores oscuros con los que dominan la temporada de invierno bajo el sobrenombre de tartán, para rendirse al pantone veraniego más ardiente y llamativo sin ningún tipo de resentimiento.
Y cuando crees que lo has visto todo en lo que a cuadros se refiere, con su nueva versión de verano resulta que son válidos para fusionar con otros prints y crear lookazos que, en estaciones anteriores, eran inimaginables. Eso sí, para hacerlo bien y no parecer que te has puesto lo primero que has pillado por la mañana con los ojos cerrados, busca estampados en la misma sintonía cromática y tu look parecerá sacado del armario de una estilista profesional.
Si ese modus operandi te resulta demasiado atrevido, siempre puedes optar por la versión de acierto para principiantes: escoger una única prenda estampada con cuadros a todo color e integrar piezas y complementos básicos y sencillos (en monocolor, recuerda) que te ayuden a componer el gran look de tendencia de la temporada.
Cuando pensamos en un armario de verano y en los típicos estampados que lo componen, las flores, los lunares o los prints tropicales afloran en nuestra mente de manera natural, pero como la moda es así y no quiere ceñirse a convencionalismos, este 2020 ha tomado prestado un estampado clásico del invierno, uno que ha trasformado y adaptado hasta tal punto que es casi imposible no querer lucirlo durante los próximos meses.