De Eugenia Osborne a Eva González: vestidos negros para noches de toque de queda

En momentos como este, parece impensable comprar un vestido de fiesta. El toque de queda ha hecho que los eventos nocturnos parezcan ahora un recuerdo del pasado y por ello los looks festivos son cada vez menos aclamados pese a la cercanía de la Navidad. Sin embargo, las celebridades demuestran que los little black dresses son perfectos para celebraciones especiales de horarios limitados. Más sencillos que los clásicos vestidos de fiesta, pero igualmente sofisticados, los vestidos negros van a ser los grandes triunfadores de la noche. Las quedadas entre amigos en casa van a adelantar su hora de comienzo, por lo que los diseños pensados para triunfar ya avanzada la noche quedan relegados y dejan paso a los LBD más especiales.

Eugenia Osborne nos ha enamorado con su espectacular vestido de Mioh. El vestido brocado de escote mariposa Ford con cinturón a tono del mismo tejido cuesta 126 euros. Aunque lo habitual es dejar la lazada al frente, creando por ello más volumen y un look más impactante, Eugenia nos enseña cómo llevarlo en celebraciones más ‘low profile’ al crear la lazada en la parte trasera. Lo combina con su última adquisición, unos tacones de Manolo Blahnik al más puro estilo Carrie Bradshaw.

Por su parte, Eva González elige otro LBD. En su caso, se trata de un vestido de lentejuelas negro de Tete by Odette que combina con botas altas de Zara. El vestido queda también de maravilla con pantalones vaqueros o con leggings, pues por su silueta también funciona como top embellished. Nos encanta el peinado, ideal para hacer en casa y para el que tan solo se necesitan unas horquillas brillantes y gel con el que aportar textura al cabello.

No son las únicas que apuestan por el little black dress: Paula Ordovás también tiene el suyo, que firma una de sus marcas preferidas, Carmen March, y que accesoriza con la marca de joyas argentina Fahoma Madrid.