ENTREVISTA EXCLUSIVA

Jesús Isnard,
el fotógrafo sevillano que ha inspirado a Mario Testino: “Ha sido un sueño”

Este joven  de 24 años se ha convertido en uno de los imprescindibles de las agendas de modelos como Eugenia Silva, María Pedraza o Sara Sampaio

Texto: Patricia Izquierdo
Fotos: Cortesía
Diseño: Bolívar Alcocer



Cuando hace un año el fotógrafo Jesús Isnard vio cómo se paralizaban muchos de sus proyectos por culpa de la pandemia, nunca imaginó que su carrera daría un giro tan brutal en apenas unos meses. Este verano en Italia sin duda pasará a la posteridad como el mejor de su vida. El verano en que Mario Testino le llamó y le invitó a una sesión de fotos en Noto tras ver en él a su yo de hace 40 años.

Pero empecemos por el principio. Jesús Isnard, un apasionado de la fotografía desde muy joven, apareció en la vida de las celebrities patrias durante el Festival de Málaga por azares del destino. Una suplencia dejó a la vista su enorme potencial, que gracias a las redes sociales ahora conoce de primera mano su gran ídolo, Testino. “Todo esto ha sido un sueño”, nos comenta aún emocionado el joven fotógrafo sobre la aventura que le ha encumbrado al olimpo de la industria. Con él hemos hablado de esta historia que parece sacada de una novela. Solo le falta música de Abba.

Duque de Alba
Jesús Isnard, en un primer plano al más puro estilo Testino.

Todo empezó en Italia

Como cada uno de los últimos tres veranos, Isnard aparcó sus proyectos en España y se marchó a pasar un mes en Sicilia. Y es que, aunque por la pandemia el viaje estuvo en el aire, al tener los billetes comprados desde el mes de enero y unas ganas tremendas de desconectar, hizo la maleta (llena de modelitos que más tarde Testino calificaría de “muy españoles”) y pasó un mes de agosto de lo más normal haciendo lo que más le gusta en el mundo: fotos. “Yo todo el mes que estuve en Italia no paré. En mi mes de vacaciones me puse a buscar modelos y a retratarlos en una Sicilia atemporal. Yo no sé estar quieto”.

De hecho, tantas fueron las fotos que publicó etiquetadas en Sicilia que cuando el fotógrafo peruano más conocido del planeta se puso en contacto con él, lo hizo en italiano. “Tres días antes de volver a España vi que Mario Testino le daba likes a varias fotos mías y al principio pensé que era una cuenta fake. Pero no. Me comentó en una foto: ‘Io voglio hablare con te’. Casi me da algo”.

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Una muestra del trabajo de Isnard.


Apenas unas horas después, Isnard, acompañado de tres de sus modelos de verano, desembarcaba tras conducir toda la noche en Noto, la pequeña localidad siciliana en la que Testino vive con su pareja desde hace 20 años, su ayudante de toda la vida y un pequeño equipo de asesores. Una aventura que Isnard aún no cree que haya vivido.

Tras el mensaje en su perfil de Instagram, ambos fotógrafos mantuvieron una conversación de lo más intensa por teléfono. Al maestro le habían sorprendido gratamente las publicaciones de Isnard en su perfil de Instagram. “Mario me contó que había entrado en mi perfil y que había visto todas las fotos, que le había inspirado mucho mi trabajo. Y yo temblando y rezando para que no se me notase el fenómeno fan. Es un genio. Estuvimos hablando como una hora por teléfono”.

Las había visto todas y quería ver y saber más de él. Quería que acudiera a su encuentro lo antes posible: tenía un proyecto para él ante el que no podía negarse.

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Jesús Isnard, junto a Mario Testino en una pausa durante una sesión fotográfica.

Una retrospectiva y un sueño cumplido

La casualidad quiso que los dos estuvieran en Sicilia. No podía cambiar los vuelos porque tenía un trabajo en Madrid agendado en tres días, por lo que el sevillano tuvo que correr y organizarlo todo a contra reloj. Una labor que conllevaba desde localizar y convencer a sus modelos a llenar una maleta entera de looks para la sesión de fotos que aparentemente iba a realizar. “Yo no sabía si creérmelo del todo o no. Era surrealista la situación. Me dijo que mi trabajo le había inspirado muchísimo, y que Mario Testino me diga eso... No hay nada más grande que me puedan decir”, confiesa emocionado.

Cuando empezó con las gestiones eran las 5 de la tarde y a las 3 de la mañana se montaban en un coche camino a Noto desde Palermo. “Tres horas en coche, los tres modelos, mis nervios y yo”. Y es que, como le revelaría más tarde Testino, esta era la primera ocasión en su carrera en la que delegaba toda la gestión de la producción en alguien externo a su equipo. La responsabilidad era mayúscula. “Según me dijo, tenía el presentimiento de que todo iba a salir bien”.

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El estilo del fotógrafo sevillano ha cautivado a Mario Testino.

Con los primeros rayos del alba, llegaron a la playa donde les esperaban en un restaurante al borde del mar cerrado a esas horas. Les dijo qué tenían que ponerse a los modelos y a él le dio unas bermudas azul marino y una camisa a juego. “A todo esto yo aún no sabía nada de lo que iba a pasar. Los modelos iban vestidos de marineros con traje de baño”, continúa. “Y entonces me dio una cámara y me dijo: ‘Haz fotos como si yo no estuviera aquí’. Durante un rato me observó con los brazos cruzados junto a su equipo que grababa todo y, llegado el momento, cogió su cámara, una Leica, y empezó a fotografiar mi trabajo”. Y entonces fue cuando le desveló el porqué de la sesión y de su interés por su trabajo.

“Estoy haciendo un proyecto muy especial y tú eres como si fueras mi yo de hace 40 años”, le explicó Testino. “Cuando he visto tus fotos, he sentido algo superespecial. He visto cosas que yo hacía de joven que no se han publicado y que no las ha visto nadie, y me he sentido muy inspirado con tu trabajo y quería conocerte. Ahora que te conozco, ya veo que hay alma en ti”. Unas palabras que Isnard recita de memoria, donde se le ha quedado grabado cada segundo que pasó junto a Mario.

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El fotógrafo peruano se siente muy identificado con el trabajo de Isnard.

El proyecto, del que aún no han trascendido muchos detalles, consiste en una retrospectiva de todo su trabajo. Un repaso de sus grandes éxitos en el que Isnard podría reproducir algunas de sus fotos más icónicas como parte del material que podría dar vida a un documental o incluso a un libro.

“Ya no es solo que me fotografíe, sino que me fotografíe a mí haciendo mi trabajo me parecía algo inimaginable. Con lo competitiva que es esta industria, que dos fotógrafos se lleven especialmente bien me parece impresionante”, concluye.

Un proyecto del que ya han salido nuevos trabajos que les unirán en los próximos meses y que, sin duda, avalan el talento de este joven sevillano que ha llegado a conquistar a Dua Lipa.

¿Cuál será su siguiente paso?