Cómo combinar y acertar con las zapatillas Converse o Vans

No estás loca por querer llevar tus zapatillas Converse en pleno invierno. Puede que no sea la mejor elección para hacer frente a las bajas temperaturas teniendo en cuenta que su tejido de lona y su suela de caucho no son los que más aíslan del frío, pero tienen algo que las hace irresistibles en cualquier época del año. Porque si hay una zapatilla que merece la etiqueta de icónica, esa es la Chuck Taylor.

Pocos son los armarios en los que no existe o ha existido un espacio de honor reservado para ellas. Especialmente para las de los colores blanco o negro, ambas básicas para entender la moda urbana.

Hemos aprendido de estas dos versiones que pueden ser utilizadas a cualquier edad, con cualquier prenda y casi en cualquier contexto, razón por la cual son muchas las que consideran a estas sneakers parte de su uniforme diario. Las fieles a este tipo de calzado lo son durante los 365 días del año. Así lo muestran al combinarlas con blusas y jeans en primavera, con camisetas y shorts en verano, con vestidos de punto en otoño y tirando de creatividad al máximo en la estación más gélida. La forma más sencilla de hacerlo es concebir estas zapatillas del mismo modo que unas botas.

Esto se consigue optando por alguna de las muchas versiones que existen en materiales infinitamente más cálidos que el original -Converse no deja de lanzar diferentes diseños cambiando no solo los colores y las formas, sino también jugando con elementos como la piel, el pelo, el Goretex, etcétera- o simplemente pensando cada look como si lo que se fuera a llevar en los pies fueran un par de botines.

Los básicos que tienen el acierto asegurado son unos pantalones vaqueros y una sudadera, pero puedes variar esta última por un jersey de punto, una combinación de camiseta y sobrecamisa o un forro polar como los que cada vez son más habituales en las tiendas, y verás que funciona del mismo modo. También con una blusa y una americana de terciopelo o dejando que sea una falda con medias tupidas las que las acompañen se logra un combo interesante.

Un truco que garantiza que el estilismo sea un éxito es que los pantalones -no tienen por qué ser jeans, pueden ser de pinzas, de punto o incluso joggers- sean de corte recto, ancho o acampanados. Basta con huir de los pitillos y abrazar con fuerza los calcetines no solo por notar esos grados de más en nuestras extremidades, sino por seguir la tendencia que esta temporada ha convertido a estos accesorios en reyes de cualquier look.

La mejor alternativa

Estas mismas directrices marcadas para presumir de Converse en pleno invierno podrían aplicarse a cualquier tipo de zapatilla, pero son especialmente trasladables a las que se consideran sus grandes competidoras: las Vans. Es en ellas en las que encuentran a su rival más fuerte.

Otrora exclusivas del mundo del skate, ahora son protagonistas de muchos de los estilismos que a diario se cuelan en nuestro timeline de Instagram y estímulos. Aquí de nuevo son muchas las interpretaciones que recibe, pero es el modelo Old Skool el gran preferido por las insiders.

Dado que las reglas del juego son las mismas en ambos casos, no debería ser complicado decantarse solo por unas, ya que son tan independientes como complementarias. Ambas ofrecen un punto de vista muy similar aunque estas últimas aportan una mayor dosis de rebeldía.