El desfile con el que Louis Vuitton ha cerrado la Semana de la Moda de París

Louis Vuitton ha vuelto a marcarse un Beyoncé/Jay-Z al convertir de nuevo al Louvre en el escenario de su último desfile, en el que ha mostrado su colección de inspiración grecorromana con Fornasetti. La colección cápsula incluye reinterpretaciones de modelos icónicos de la firma que se encargan de respetar el imaginario de Vuitton incluyendo el universo ilustrado de Fornasetti y la contemporaneidad de Nicolas Ghesquière.

Antes de continuar, si te estás preguntando cómo ha conseguido una vez más la marca de Nicolas Ghesquière hacerse con el Louvre, la respuesta es la misma que resolvería (casi) cualquier duda: el dinero. La firma es un importante donante del museo, por lo que cuenta con acuerdos que le permiten que sus desfiles se desarrollen en él.

Por supuesto, el coste depende de si el show tiene lugar durante el día o durante la noche, de cuántas galerías se involucran, de si cuadros como 'La Mona Lisa' se incluyen y de si hay planos aéreos que muestren la pirámide del museo, tal y como explicó a 'New York Times' Adel Ziane, director de Relaciones Externas del Museo del Louvre.

La colección de Louis Vuitton mira hacia el pasado y hacia el futuro, y ha puesto a Daft Punk como banda sonora, un sentido adiós a los músicos que han revolucionado las pistas de baile y que acaban de anunciar su retirada.

“Esta temporada nos hemos adaptado a estos tiempos repletos de retos y estoy feliz de poder compartir nuestro camino con vosotros. Lo primero, y lo más importante, es agradecer a todos los que han logrado que esta colección cogiera forma”, señala el director creativo en un corto discurso con el que anuncia el desfile. “Me encanta cómo Fornasetti ha vuelto a explorar y reinterpretar el legado del clasicismo de la Roma antigua, añadiendo nuevas referencias al imaginario histórico”, asegura Ghesquière en un comunicado. “Como un diseñador que siempre ha admirado la capacidad de la moda para evocar el pasado, el presente y el futuro de forma simultánea, quería añadir nuevas capas a este palimpsesto creativo”. Botas gladiadoras, vestidos de terciopelo y abrigos oversize cuentan con imágenes doradas de Fornasetti.

Lentejuelas, modelos brillantes, tules y chaquetas masculinas forman parte de una colección que da un giro a los referentes históricos y que ahonda en la tendencia de la temporada de las marcas de combinar diseños outwear con prendas festivas que aúnan universos aparentemente antagónicos. Louis Vuitton pone el cierre de la Semana de la Moda de París, que ha fantaseado con espacios de libertad y celebraciones sin olvidar las limitaciones que las restricciones traen consigo, jugando por ello con la esperanza pero sabiendo mantener los pies en la tierra en todo momento.