El desfile (y el deseo) de Stella McCartney

“Ecléctico” o incluso “excéntrico” han sido dos de los adjetivos que más se han empleado para definir el último desfile de Stella McCartney, pero “renovador” es el que hoy vamos a emplear. Tras los cambios por los que ha pasado la firma a nivel interno -Stella retomó la parte de la marca que Kering le había comprado y pasó a formar parte de LVMH-, su colección otoño-invierno 2021/2022 supone un nuevo capítulo para la firma. La diseñadora no ha querido volver a esa antigua normalidad ni abrazar la nueva, sino que se atreve a subir la apuesta hasta el infinito con colores atrevidos y texturas casi cibernéticas. Cree que los cambios a nivel empresa de su marca, sumados a los que el covid ha traído consigo, han sido los motivos por los que esta colección supone un renacer.

El mundo de la moda se está poniendo por fin las pilas para abrazar la sostenibilidad, pero ese terreno es en el que Stella lleva toda la vida reinando. Prueba de ello es que el 77% de los materiales empleados en la colección sean sostenibles y que la última tecnología vegana se haya puesto en marcha para dar forma a las propuestas. Viscosa respetuosa con los bosques, lentejuelas sin PVC, lana trazable que proviene de granjas regenerativas, ante vegano… El interior del calzado está fabricado con materiales con un 35% de base biológica, y las variedades mate cuentan con un 47% de estos materiales en su parte superior. El universo McCartney tendría que servir de ejemplo a la moda, como el hecho de que cada prenda cuente con su anotación sobre trazabilidad, demostrando que la moda ha de ser no solo sostenible, sino también, transparente.

Has de saber que el impacto medioambiental de los bolsos de origen no animal de la marca es 24 veces inferior que el de los bolsos de piel, y la diseñadora ha querido retomar su superventas, el bolso modelo Falabella, que desde su nacimiento en 2010 se calcula ha salvado la vida de unas 300.000 vacas. El desfile, filmado en la Tate Modern de Londres, se inspira en los clubes londinenses y combina diseños de fiesta con prendas de inspiración masculina y básicos atemporales. Los estampados opuestos y las texturas son una parte esencial de las propuestas, entre las que encontramos chaquetas de leñador, estampados psicodélicos y algunos diseños que muestran con sutileza la piel.

Los blazers se agrandan, la campana de los pantalones se vuelve infinita y los vestidos de fiesta a todo color de satén de viscosa eco-friendly se combinan con americanas y chaquetas bomber en un mundo en el que la fiesta, el trabajo y el hogar ya son uno, sin fronteras ni distinciones. Estampados geométricos invitan a los fans de la marca a volver a bailar, algo que Stella McCartney echa de menos y convierte en el epicentro de sus propuestas. “El invierno de 2021 aúna la fantasía con la realidad. 'Inspired by D' se llama así por la letra D de deseo, del manifiesto de Stella McCartney, un documento de la A a la Z que ahonda en el significado de los términos para que la moda se dirija hacia la sostenibilidad. Cada pieza refleja esas ganas colectivas de volver a vestirnos para salir y combina el legado, el glamour y el espíritu deportivo para elevar con extravagancia y opulencia la norma”, explica la marca. ​