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Ni pijamas, ni sudaderas: el malrollero 'dress code' de los Oscar
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PREMIOS OSCAR

Ni pijamas, ni sudaderas: el malrollero 'dress code' de los Oscar

La Academia del Cine ha enviado una carta explicando los códigos de estilo de la gala

Foto: Charlize Theron, vestida de Dior, posa a su llegada a la 92 edición de los Óscar. (EFE)
Charlize Theron, vestida de Dior, posa a su llegada a la 92 edición de los Óscar. (EFE)

A estas alturas ya podríamos hablar de un manual de estilo de la nueva alfombra roja, esa que en realidad rara vez pisan actualmente las celebridades. Sin embargo, los premios Oscar no están dispuestos a que la red carpet más fotografiada del planeta no sea recorrida este año. Tampoco quieren que la gran noche del cine cuente con sudaderas promocionales ni con pijamas, aunque estos sean de Prada. Los galardones cinematográficos han impuesto un dress code ajeno a la actualidad: inspiracional y aspiracional. Así lo ha hecho saber la Academia del Cine a través de una carta en la que insta a los nominados a acudir a la gala.

Como lo lees: se acabó la era del glam Zoom. "A los que no podáis acudir por cuestiones de agenda o por los problemas que todavía acarrea viajar, queremos que sepáis que no habrá opción de hacer Zooms durante la gala. Estamos trabajando muy duro para conseguir un show seguro y disfrutable para que lo viváis en persona y que lo vivan millones de fans del cine de todo el planeta, y creemos que las experiencias virtuales desmerecen estos resultados", escriben. “Queremos una fusión entre lo aspiracional y lo inspiracional, lo que se traduce en que es correcto asistir con un atuendo formal, pero no lo es apostar por el casual”.

Como estilistas, el mundo virtual nos ha otorgado gran capacidad de control al poder manipular las luces, los ángulos y los fondos”, explica a ‘The Guardian’ Wayman Bannerman, de Wayman + Micah. “Vestir a las celebs para apariciones virtuales nos ha permitido pensar más allá de nuestra zona de confort y divertirnos, bien sea jugando con los colores o con las siluetas”, asegura.

Mientras que muchos aplauden la decisión de los Oscar de borrar la huella virtual de la gala, otros creen que están mostrando señales de inmadurez y una preocupante distancia de la realidad. Sin embargo, estilistas reputadas como Elizabeth Stewart celebran el regreso de la alfombra roja, pues es el escaparate en el que la moda puede brillar tras un complicado año.

Lo cierto es que aunque las conexiones en directo siguen dando problemas gala tras gala, y por más que las muestras de emoción al recibir un premio en casa son mucho más espontáneas y cercanas cuando son retratadas a través de Zoom, lo que sí se estaba logrando era una estética muy cuidada y elaborada. Los jardines de las celebridades se habían convertido en improvisadas alfombras rojas y las redes sociales se encargaron de hacernos ver algunas de las ventajas de poder ver la gala en el sofá de casa.

Por ejemplo, Cate Blanchett posaba para su estilista con una mascarilla hidratante poco antes de la celebración de una de las entregas de premios de la temporada, algo que los Oscar no permitirán que ocurra de nuevo. Los encargados de entregar premios en la 93.ª edición de los Oscar serán Brad Pitt, Halle Berry, Harrison Ford, Reese Witherspoon, Renée Zellweger, Joaquin Phoenix, Laura Dern, Angela Bassett, Bong Joon Ho, Don Cheadle, Bryan Cranston, Regina King, Marlee Matlin, Rita Moreno y Zendaya. No cabe duda de que Brad Pitt acudirá vestido de Brioni, marca de la que desde hace tres años es embajador y para la que ha diseñado una colección cápsula inspirada en el traje con el que el actor recogió el año pasado su Oscar.

Tendremos que esperar a la madrugada del 25 de abril para saber si alguna celebridad se vengará de la carta enviada por la Academia y aparecerá en la alfombra roja en zapatillas de estar por casa, en pijama o en jeans.

A estas alturas ya podríamos hablar de un manual de estilo de la nueva alfombra roja, esa que en realidad rara vez pisan actualmente las celebridades. Sin embargo, los premios Oscar no están dispuestos a que la red carpet más fotografiada del planeta no sea recorrida este año. Tampoco quieren que la gran noche del cine cuente con sudaderas promocionales ni con pijamas, aunque estos sean de Prada. Los galardones cinematográficos han impuesto un dress code ajeno a la actualidad: inspiracional y aspiracional. Así lo ha hecho saber la Academia del Cine a través de una carta en la que insta a los nominados a acudir a la gala.

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