Hablemos del regreso de la bomber como chaqueta de tendencia
De inspiración aviador, corte oversize y una función todoterreno, la cazadora bomber está de vuelta de manera oficial y tenemos las claves de su reaparición
Hay un refrán popular que dice que 'todo lo bueno siempre vuelve', y en el caso concreto de la chaqueta bomber se cumple al pie de la letra. Imprescindible en el armario de la década de los 90 y una vez más como tendencia a mediados del nuevo milenio, lo cierto es que su origen se remonta a principios del siglo XX. Utilizada en aquel entonces por los aviadores y pilotos, no fue hasta después de la II Guerra Mundial cuando su uso se extendió al resto de la población y tanto hombres como mujeres adoptaron a la bomber como una cazadora más en su vestidor.
Más recientemente, en los últimos años, referentes de moda tan dispares como la modelo británica Kate Moss, su compatriota la influencer Alexa Chung o, al otro lado del mundo, la socialite neoyorquina Olivia Palermo la han llevado y hecho suya, demostrando así que esta chaqueta de inspiración aviador se adapta a todos los estilos. Con ese largo recorrido a sus espaldas como prenda de fondo de armario, hoy, en el otoño de 2021, la bomber ha regresado y es tendencia.
Su nueva andadura arrancó encima de las pasarelas. Firmas lo suficientemente importantes como Prada, Stella McCartney, Isabel Marant o Louis Vuitton decidieron, sin ningún tipo de acuerdo previo, apostar por ella.
Recuperada y puesta al día, cada marca se inclinó en otorgarle una imagen diferente acorde con la colección de otoño-invierno que estaban presentando en sus desfiles, desde el modelo de inspiración art déco creado por Prada, pasando por la clásica de McCartney o la satinada de Louis Vuitton, mil y una vidas que venían a revelarnos que su regreso a la primera línea de la industria de la moda estaba (casi) hecho.
La confirmación definitiva nos llegó durante la última y más reciente edición de la Semana de la Moda de Copenhague. En sus calles, varias danesas de peso, como son Emili Sindlev y Jeanette Madsen, escogieron una bomber para coronar sus looks y desde ese preciso momento supimos que iba a ser la cazadora de tendencia de la temporada.
Sin perder sus señas de identidad imprescindibles, estas son su corte oversize, su cuello redondo, sus detalles engomados y su cierre frontal mediante una cremallera, y sin salir en ningún momento de nuestro cajón de sastre, aunque la bomber siempre ha estado ahí, es este otoño cuando repite rol como chaqueta must-have y apunta la siguiente premisa: no puede faltar en tus estilismos de entretiempo.
Lisa o estampada, minimal o de estética 'collage', brillante o mate, como prenda de abrigo única o debajo de tu plumífero o sastre, en la variedad de su diseño se esconde uno de los grandes secretos de la cazadora y que ha vuelto a traerla a la vida. También que es todoterreno, versátil, cómoda, práctica y, al mismo tiempo, estilosa, capaz de poner el toque cool y urbano a cualquier outfit e incluso protagonizarlo.
Habrás caído en la cuenta de que toca rebuscar en tu vestidor para dar con aquella bomber de la que no te separabas hace unos años. ¿Sin ningún valioso ejemplar en tu poder? Invierte en un modelo clásico, tu salvavidas de la temporada, y dale el toque actual al look sumando otras prendas y otros accesorios de tendencia. Una vez que domines ese tipo de outfits básicos de principiante, juega con la superposición de capas y atrévete a llevarla, por ejemplo, bajo tu americana en el trabajo.
Un último mensaje y no puede ser más claro: este año, tu chaqueta será bomber o directamente no será.
Hay un refrán popular que dice que 'todo lo bueno siempre vuelve', y en el caso concreto de la chaqueta bomber se cumple al pie de la letra. Imprescindible en el armario de la década de los 90 y una vez más como tendencia a mediados del nuevo milenio, lo cierto es que su origen se remonta a principios del siglo XX. Utilizada en aquel entonces por los aviadores y pilotos, no fue hasta después de la II Guerra Mundial cuando su uso se extendió al resto de la población y tanto hombres como mujeres adoptaron a la bomber como una cazadora más en su vestidor.