Carla Bruni en el homenaje de Saint Laurent en París a Rocío Jurado

En 1977, Yves Saint Laurent rendía homenaje a ‘su España’ creando una colección inspirada por nuestro país en la que los aires gitanos, los volantes y los estampados de flores configuraron uno de sus trabajos más recordados. 44 años después, Anthony Vaccarello parece beber de esas fuentes para presentar su apuesta para el próximo verano de 2022.

Sobre la pasarela (un sobrio escenario en cuyo centro se erigía un andamio de luces y agua, con la torre Eiffel de fondo), ha paseado una propuesta muy básica sobre la que ha creado diferentes versiones. Las salidas que hemos visto se podrían resumir en monos hiperceñidos, chaquetas armadas con hombreras marcadas y algún que otro vestido. Todo en blanco y negro, con alguna concesión al rojo o al azul, y unos últimos looks donde daba rienda suelta al colorido de nuestro país con estampados florales sobre propuestas amarillas y rojas. Los accesorios, eso sí, XXL, y los zapatos altos, casi imposibles, para conseguir una silueta potente pero muy skinny.

Si a lo largo de los 60 y 70 Yves Saint Laurent revolucionó la moda, en los 80 parece que la disfrutó, y es que es difícil separar la idea que tenemos de exceso de aquella década sin ver a una mujer vestida con alguna de las creaciones del genio francés. Vaccarello explota al máximo todo ese universo, que para el próximo verano se presenta en tops cut-out donde se exhiben las letras del logo de la compañía, o en transparencias que dejan poco a la imaginación, pero que resultan coherentes por la belleza de unos conjuntos en negro y cristal que sirvieron de broche de oro para esta cita con la moda.

Fuera de la pasarela, entre el público, la audiencia se ha dividido en dos grupos muy diferenciados. Por una parte, encontramos a las influencers y nuevas generaciones de artistas: ellas, con diseños hipercortos y muy sexy; ellos, con la estética descarada que ha marcado en el hombre Vaccarello. El modelo y artista David Alexander Finn, pero, sobre todo, la cantante australiano-neozelandesa Rosé (con más de 47 millones de seguidores en Instagram), han sido dos de los protagonistas. De hecho, minutos antes del inicio del desfile en Twitter solo se hablaba de la reina del K-pop.

El otro grupo lo formaban las ‘consagradas’ como Carla Bruni...

...y Charlotte Gainsbourg, que ostentaban la representación francesa.

Rossy de Palma y su hija Luna ponían el acento español a esta presentación. Todas vestidas con trajes hasta los tobillos, buscando acercar las propuestas del diseñador belga a un público más adulto.

También Georgia May Jagger.

Sorprendente la presencia de uno de los actores de la serie 'Sex Education', Jojo Macari; nos muestra la visibilidad que proporcionan las plataformas audiovisuales colocando a sus actores en el front row parisino.

Talya Ryder, la actriz centennial, también ha estado presente en el desfile.

Pese a todo, para muchos, el desfile no será recordado por esto, sino por un homenaje velado a ‘la más grande’. A mitad de desfile, la música cogía tintes flamencos, sonaba la guitarra española y comenzaba a sonar una versión de ‘Se nos rompió el amor’, uno de los temas más conocidos de Rocío Jurado, que en un año donde ha estado en boca de todos su fama ha llegado hasta París. Y lo mejor de todo es que la Jurado hubiera estado encantada con los diseños de Vaccarello, porque además de tener bastante del YSL clásico, respiraban mucho del estilo de la chipionera.