Muere Patrick Demarchelier, el fotógrafo oficial de Lady Di que dio prestigio a las revistas de moda

Los retratos de Patrick Demarchelier se hicieron conocidos por capturar la personalidad de aquellos a quienes retrataba. Madonna y Hillary Clinton son tan solo algunos de los nombres de las personalidades que posaron ante una cámara que se convirtió en la indiscutible favorita de Diana de Gales, que le pidió en 1989 convertirse en su fotógrafo oficial. Cuando le preguntaban a quién le gustaba fotografiar más, tenía una respuesta tan mágica como sorprendente. “La gente cuenta con que conteste Diana o una celebridad. Pero en realidad es mi perro, Puffy. Piensan que hablo de Puff Daddy. ¡No! ¡Me refiero a mi perro!”, dijo a ‘Telegraph’ en 2012.

Demarchelier fue así el primer fotógrafo oficial de la familia real que no era inglés, y se convirtió en uno de los más cercanos a la princesa de Gales, que quedó cautivada por la cercanía y sencillez de sus imágenes, que llamaron su atención al encontrarlas en una revista de tendencias. Sin duda, sus imágenes sirven en la actualidad de fuente de inspiración para las nuevas generaciones de genios de la fotografía, especialmente para los que se adentran en el complicado mundo de la imaginería royal. El ex fotógrafo de la realeza Ian Lloyd, al ver las nuevas fotografías de Kate Middleton tomadas por Paolo Roversi con motivo de su 40 cumpleaños, no dudó en señalar su influencia. “Recuerdan a los retratos que Patrick Demarchelier tomó de la princesa Diana: fotografías en blanco y negro, con un fondo minimalista y un aura romántica”, asegura.

Precisamente su dominio del blanco y negro se convirtió en una de sus señas de identidad, así como la apuesta del fotógrafo por algo poco habitual en los retratos de moda: la sonrisa. Abogó también por capturar instantes ajenos a las poses hieráticas y calculadas. “Las mejores tomas de las sesiones son aquellas que fueron tomadas por accidente”, afirmaba. Fue él quien, tras haber fotografiado a Kate Moss para una revista de moda en los años 90, le recomendó a Calvin Klein contratar a la modelo. Su recomendación fue escuchada, y fue él quien retrató a Moss para la firma americana, dejando así una imagen que ya forma parte de la historia de la fotografía de moda.

Mientras que Peter Lindbergh fue el creador de las supermodelos, Demarchelier se encargó de elevar la valía de sus imágenes en las revistas de moda gracias a sus magnéticas fotografías. Juntos inmortalizaron el mítico Calendario Pirelli en 2014.

Su nombre es tan icónico en el universo de las tendencias que incluso fue utilizado como chascarrillo en ‘El diablo viste de Prada’, donde le exigen al personaje al que da vida Anne Hathaway “conseguir a Patrick”. Así es como se ve forzada a descubrir que ese tal Patrick, que no necesita apellidos en el mundo de la moda, no era otro que el gran Demarchelier.

La controversia llegó a su vida en 2018, cuando fue acusado de abusos por 50 modelos. Aunque negó las acusaciones, dejó de trabajar para importantes grupos editoriales. La noticia de su muerte sacude hoy el mundo de la moda.

Amber Valletta, que ha explicado que fue uno de los primeros fotógrafos junto a los que trabajó, ha mandado su amor a la familia, mientras que Bella Hadid, que posó para él junto a Chu Wong, ha recordado a Patrick. “Estoy agradecida de haber posado para ti, la persona más gentil, legendaria y llena de vida del mundo”, escribe la modelo en Instagram, donde el diseñador de calzado Brian Atwood, así como el anterior publicista de Thierry Mugler, Jean-Baptiste Rougeot, han recordado su legado en sus redes sociales. Sofía Sanchez de Betak, la amiga íntima de Marta Ortega, se ha sumado a este homenaje 3.0 al subir un retrato de ella tomado por el icónico fotógrafo, para el que dice fue un honor posar.

Hoy el mundo de la moda se despide del hombre capaz de capturar sonrisas, personalidad y magia con su cámara.

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