Mónica Cruz copia el truco de moda infalible de Penélope

Mónica Cruz posa deslumbrante ante las cámaras en la première mundial de WMF celebrada en Haus der Kunst, en Múnich, donde se ha celebrado una gala a la que no han faltado figuras de la moda de la talla de Diane Kruger. Pero antes de hablar del impresionante outfit escogido por la actriz germana, una de las más estilosas del panorama y que últimamente ha reactivado su agenda al acudir de nuevo a algunas de las fiestas más prestigiosas, vamos a hablar del impresionante vestido de estética ‘flapper’ de Mónica Cruz.

La actriz y bailarina ha apostado por un diseño asimétrico de lentejuelas metalizadas con sutil degradado, que le aporta movimiento, y unos divertidos flecos que dan el giro años 20 a este outfit disco. Se trata de un espectacular vestido de la colección primavera-verano 2022 de Elisabetta Franchi.

Mónica ha apostado por una fórmula de estilo que ya le habíamos visto poner en práctica a Penélope Cruz, que en el pasado Festival de San Sebastián le fue infiel a Chanel al decantarse por un vestido de estética ‘flapper’ de Atelier Versace con el que le dio a su compañera y amiga Marion Cotillard el premio Donostia a toda su trayectoria en la edición de 2021 del festival.

Aunque el vestido de Penélope era también asimétrico, la asimetría de su diseño italiano se encontraba en el bajo, mientras que Mónica ha preferido llevarla en la manga. Ambas han lucido el look con complementos metalizados, subrayando así la fiebre Studio 54 que despiertan sus looks, pese a que a causa de los divertidos flecos son una oda a los 'locos años 20'.

Por cierto, en una de las últimas ocasiones en las que las hermanas posaron juntas, Penélope ya había puesto en marcha su truco de estilo, pues llevó un vestido asimétrico metalizado de flecos brillantes de Versace, un look del que ha tomado nota Mónica.

Mónica estuvo acompañada durante la velada de otros rostros conocidos.

En la gala pudimos ver también a la modelo Nico Potur, que se hizo conocida por su relación con Brad Pitt. Para el encuentro escogió un vestido morado de Matija Vuica y pendientes de Sevigne.

Marlies Pia P. tampoco faltó al evento, en el que lució un vestido de Sandra Mansour con clutch metalizado de Jimmy Choo (por si no quedaba claro que los complementos plateados son tendencia, he aquí una prueba más) y joyas de Ole Lynggaard Copenhagen.

Otra de las invitadas de renombre ha sido Diane Kruger, que ha presumido de piernas con un minivestido palabra de honor de Brandon Maxwell bicolor. Se trata de un diseño de seda estampado que cuesta 2.028 euros y que accesoriza con tacones de The Attico y un clutch de Prada.

La influencer alemana Caro Daur estaba increíble con un dos piezas blanco de silueta años 70 que elevó con accesorios fucsias con aplicaciones de Versace. La divertida instagramer posó en sus stories con su impoluto look disfrutando del cóctel de moda, el martini espresso, y pronto compartió el devenir de la historia: se le volcó encima la bebida, por lo que tuvo que cambiarse de inmediato.

¿El resumen de la gala? Que tenemos que copiarle el truco a las hermanas Cruz, porque es indudable que los vestidos de lentejuelas de estética ‘flapper’ nunca fallan. No podemos negar que nos encanta la forma en la que deciden no intentar relajar el look al subrayarlo con accesorios metalizados, los auténticos vencedores de la temporada.

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