Los looks del debate andaluz, a examen: del mono de Olona a la camiseta de Lorca de Teresa Rodríguez

Los debates políticos televisados se han convertido en el escenario perfecto para que los candidatos pongan en marcha sus herramientas estilísticas al servicio del mensaje. Desde colores hasta tejidos, cada detalle ha de ser tenido en cuenta, pues los asesores de estilo del universo de la política no dejan al azar ningún detalle. Las candidatas a presidir la Junta de Andalucía han apostado por outfits muy diferentes repletos de detalles a tener en cuenta, y hoy vamos a hablar de cada uno de estos detalles.

La más comentada ha sido indudablemente la candidata de la coalición Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, gracias a su camiseta del poeta Federico García Lorca. Nos ha permitido ver con mayor detalle su camiseta manga corta estampada en serigrafía, de tejido tubular y doble costura en cuello, mangas y bajo, gracias a una imagen que ha compartido durante la sesión de maquillaje previa, donde ha aplaudido el trabajo de las maquilladoras. “Mi madre me dice que en Canal Sur es donde más guapa me sacan. Grandes las trabajadoras de maquillaje”, ha escrito.

Ha llevado su simbólica camiseta con una chaqueta blazer verde de interior satinado que junto a su ‘t-shirt’ rememoran la bandera de Andalucía, y que ha llevado con dos pegatinas reivindicativas en las solapas. La líder andalucista no ha dudado en llevar pantalones vaqueros para el debate, demostrando así que ahora la política le abre las puertas a un código de estilo mucho más desenfadado que, sin embargo, no convence a muchos asesores de imagen, que creen que, en demasiadas ocasiones, los políticos de izquierdas confunden el cuidado de la imagen con posturas antagónicas a la suya.

Así lo piensa Marta Pontnou, asesora de imagen política. “Hasta ahora lo moderno y lo transgresor era llegar al Congreso con jeans y camiseta, porque suponía la llegada por fin de las izquierdas a un espacio que había estado muchos años en manos de la derecha. Como hemos asociado erróneamente el poder con trajes y corbatas (digo 'erróneamente' porque las piezas y los atuendos no tendrían que ser de ningún color político), para diferenciarse lo viejo de lo nuevo, apostaban por looks más 'casual' para reforzar esa imagen progre”, explicaba a Vanitatis.

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Comparte con nosotros su opinión acerca de la elección denim de la candidata de Adelante Andalucía. “Otra vez el falso referente de que para ser de izquierdas hay que ir en vaqueros y con una camiseta reivindicativa. En un debate televisivo han de primar el protocolo y la seriedad. Creo que hoy en día se pueden hacer muchos juegos sin tener que recurrir al recurso fácil. La fórmula del vaquero con chaqueta americana se está quedado obsoleta, estamos jugando demasiado a ser radicales. Los jeans han sido siempre la prenda del trabajador, y desde la posición de política, que es un privilegio, creo que emplear el vaquero para jugar a la moda no es respetuoso. Para ir a un debate hay que estudiar bien el look”, opina.

Macarena Olona se ha decantado por un mono de efecto cruzado que recuerda a las propuestas de la marca Coosy, que esta temporada hemos visto en muchas ocasiones en diversas bodas. Este diseño burdeos cuenta con una silueta muy favorecedora, y la política se ha asegurado de que su look no caiga en la sensualidad extremada al llevar por debajo un top lencero con el que evitar que, ante cualquier movimiento o gesto, su mono muestre centímetros de escote de más.

Para hablar del look de Inmaculada Nieto, recurrirmos una vez más a Marta Pontnou, que comparte con Vanitatis su visión sobre su atuendo: “Creo que tiene falsos referentes. Está en esa edad en la que nos han metido en la cabeza que hay determinadas prendas que no llevar para evitar dar la apariencia de estar intentando parecer demasiado joven. Hablamos de esa lucha interna en la que te sientes aún joven y no quieres que te digan lo que te quieres poner. Añade piezas de color a sus looks y lentejuelas para que se vea que aún es joven y moderna, pero eso hace que el atuendo carezca de armonía".

Y añade: "Creo que tendría que atreverse a buscar algo que concuerde con su manera de ser. Le falta dejarse llevar, porque está encorsetada por la mentalidad imperante respecto a lo que se espera de una mujer a los 50. El pelo tendría que ser un arma, porque el cabello rizado tiene mucho carácter y poder, siempre ha sido un símbolo de rebeldía, de valentía y libertad, pero ella lleva un corte muy clásico para contrarrestar volumen. Le recomendaría cortárselo para que cogiera más volumen y tomara realmente el protagonismo, dejando así de ser una característica”.

"Juanma Moreno lleva un cuello impecable con corbata y medida perfecta de traje. Se nota que se lo hacen a medida y que está acostumbrado a llevarlo", opina Pontnou.

"Sin embargo, a Juan Espadas se le ve incómodo. No lleva bien ajustada la americana, porque no es un diseño a medida. Ha escogida una que le cierra, pero le va grande de hombros. Quiere llevar corbata para diferenciarse de los compañeros, pero esto le resta. Se le ve disfrazado y además, el bajo de los pantalones es demasiado largo, y la camisa la lleva demasiada abierta", sentencia.

Para terminar, Marta Ponou comparte con nosotros su opinión sobre el look de Juan Marín. "Se ha subido demasiado el pantalon, que le tira de las piernas. Creo que el color elegido es demasiado brillante, supongo que en un intento de emular juventud...".

¿La conclusión final a la hora de evaluar los outfits masculinos? "Ponerse un traje no garantiza la perfección. No es una prenda fácil de llevar, ha de ser a medida, porque tiene que ser adaptado a cada cuerpo y es vital escojer bien tejidos, cuellos y corbatas por parte de los asesores. ¡No todo vale!", concluye.