Así de rentable le sale a Balenciaga su relación con Kim Kardashian

Cuando Balenciaga subió en su desfile dentro de la Semana de la Alta Costura a la pasarela a celebridades de la talla de Nicole Kidman y Kim Kardashian, sin duda Demna Gvasalia sabía bien lo que hacía. Al fin y al cabo, hablamos de un diseñador que comprende como nadie la cultura pop y que ha logrado con sus propuestas aunar la esencia del legado couture de la marca con las celebridades más aclamadas del planeta. Es muy posible que en su acuerdo con Kim Kardashian, que además es imagen de la marca y se viste prácticamente a diario con sus diseños, haya una cláusula en la que se trata de forma específica las acciones en redes que ha de llevar a cabo, y una de ellas consistió en subir su look a la salida del Hôtel de la Marine. Hablamos del ya icónico vestido de lentejuelas de alta costura de la marca, que llevó con una de las inolvidables máscaras de poliuretano del desfile.

Launchmetrics anunció el miércoles que este post ha generado más de 935.000 dólares en Media Impact Value, un valor que se calcula a través de cada post, interacción o artículo sobre una marca. El de Kim cuenta con casi 2,5 millones de likes, y la diseñadora se ha alzado también como la celebridad número uno del ranking elaborado durante la Semana de la Alta Costura al generar alrededor de dos millones de dólares en Media Impact Value.

Balenciaga sabe lo que hace cuando apuesta por Kim Kardashian, una celeb que fue repudiada por las grandes marcas durante mucho tiempo, hasta que Ye decidió darle un giro a su armario y ayudó a la empresaria a introducirse en el círculo de los insiders de la moda. La firma la ha ayudado a poner sobre la mesa una hoja en blanco en la que escribir su nueva era. Eso fue casi literalmente lo que hizo cuando apareció en la Met Gala con un look negro de estética zentai con el que ni siquiera se le veía el rostro, dejando claro que es tan conocida que tan solo su silueta es suficiente para saber que se trata de ella.

Eso es precisamente lo que también logró Marilyn Monroe, a la que rindió homenaje en la última gala del Met, y con esta operación demostró también ser un lienzo para Balenciaga, que desde entonces ha convertido a Kim en su obra de arte/anuncio andante. Con su apuesta por la celebridad dentro del marco de la alta costura, hasta ahora ajena a intrusiones celeb, demuestra el poder de las redes sociales y cómo contar con uno de los personajes más seguidos del mundo es un hit para la firma. Kim ha logrado poner de moda prendas tan complicadas como las 'pantaboots', una pieza híbrida que fusiona los leggings con las botas y que se ha convertido en un ‘must’ en su armario.

A ella le debemos también el regreso de uno de los bolsos más icónicos de Balenciaga, el modelo Motorcycle, cuya versión 3.0 lleva en el anuncio de la firma con sus propias iniciales en él. Aunque no sabemos cuánto dinero se embolsa Kim por su relación comercial con la firma, no cabe duda de que a Balenciaga este acuerdo le está saliendo muy rentable. Suponemos que ahora hay marcas que se están tirando de los pelos al haberse negado a vestir a Kim cuando tantos pensaban que era una 'celebridad de reality más'... En cambio, quienes siempre apostaron por ella, como Riccardo Tisci, Olivier Rousteing o Demna Gvasalia, están ahora recogiendo los frutos de su apuesta personal. Al parecer, quien ríe el último cobra mejor.