Por qué el lujo se suma a la moda de baño (y apuesta por el estilo Casiraghi)

Lo habitual al hablar de Hermès es pensar en sus icónicos bolsos, pero Vanessa Lorenzo se ha encargado de recordarnos que la firma de lujo también cuenta entre sus propuestas con diseños ‘swimwear’ con los que lleva el glamour a la piscina. La modelo siempre nos sorprende con sus sofisticadas elecciones de moda de baño, que son minimalistas, elegantes y ajenas a las marcas habituales. En esta ocasión posa con un bikini asimétrico azul, que se ha convertido en uno de sus colores preferidos a lo largo del verano, como demostró al lucir este otro bikini azulado de B The Beach Brand.

Pero sin duda los diseños que lleva con más estilo son los bañadores, que se han convertido en la prenda fetiche del verano gracias a figuras como Elsa Pataky y Carlota Casiraghi. La monegasca no solo nos ha enamorado con su bañador negro, sino que estos días ha llevado también bañadores de firmas como Isabel Marant. De esta forma, al igual que acaba de hacer Lorenzo, nos recuerda que las grandes marcas también se dan chapuzones en sus propuestas.

Nieves Álvarez ha lucido un bañador negro de líneas minimalistas con escote en la espalda, por lo que queda claro que los diseños de la temporada preferidos por royals y supermodelos son radicalmente opuestos a los favoritos de las influencers, que prefieren los bikinis de siluetas XS con aberturas imposibles.

Del mismo modo que Demi Moore ya se quejó de que los diseños de moda de baño actuales son demasiado atrevidos, y ha creado por ello su propia línea de conjuntos con los que ir a la playa apostando por siluetas retro, marcas como Hermès e Isabel Marant nos recuerdan que en materia 'swimwear' también se puede todavía encontrar creaciones sofisticadas. Precisamente, el otro día hablamos de cómo los diseños bicolor de Chanel eran el nuevo caramelo de las redes sociales, con iconos del universo digital como Caro Daur y Paula Ordovás apostando por ellos.

Mientras que marcas como Eres ofrecen diseños de moda de baño a elevados precios a causa de su experiencia en los tejidos destinados al mar y a la playa, la razón por las que las grandes firmas venden sus diseños a precios tan prohibitivos no es ni mucho menos su 'expertise' en la materia, sino el poder que cada marcha lleva asociado, por lo que incluso el universo de los bañadores y de los bikinis se comporta como el del día a día cuando apuesta por los logos, que de alguna manera justifican que una camiseta cueste 500 euros pese a tratarse de un diseño de algodón...

Esa es la razón por la que esta temporada arrasan los ‘tank tops’ blancos con minilogo de Loewe y de Prada, y porque pese a costar cientos de euros, por supuesto son mucho más asequibles que los bolsos o vestidos de dichas marcas, por lo que, al igual que ahora la moda de baño de firma, funcionan como el caramelo snob que antes asociábamos por ejemplo con las fundas de móvil de las grandes firmas. La nueva manera de llevar los diseños en la actualidad es con camisas clásicas de silueta oversize, una tendencia que han llevado desde Sassa de Osma hasta Casiraghi, que accesoriza su look de baño con capazo de rafia de Vanessa Bruno y gafas de sol de Loewe.