El triunfo de la moda WTF (What the fuck!). Has leído bien

Posiblemente, a estas alturas te hayas dado cuenta de que cada vez es más habitual que los looks carentes de sentido sean los que triunfan. Quizás fue el outfit con el que Carrie Bradshaw se convertía en una suerte de Doña Rogelia histriónica con guantes de limpieza el que dio el pistoletazo de salida a esta tendencia, pero no ha sido el único en dejarnos atónitos. Ya se dice que Julia Fox ha sido el personaje del año a causa de su indescriptible armario ajeno a tendencias y amigo de las exclamaciones, y las series televisivas han ahondado en los outfits más irreverentes.

La tercera temporada de 'Emily in Paris' ha vuelto a sorprender con los looks imposibles de sus personajes, y los responsables de vestuario de la serie saben que cuanto más excéntricos sean los outfits de las protagonistas, más virales serán. El primer capítulo comienza con Emily enfundada en un vestido de Magda Butrym combinado con una capa con plumas hecha ‘ad hoc’ para el capítulo y con plataformas de Christian Louboutin, un diseño del que es imposible despegar la mirada y con el que cerrar la boca es prácticamente imposible.

Marylin Fitoussi, responsable de vestuario de la serie, creó una capa con plumas cosidas a mano junto a la firma parisina Marcy. El disfrute de esta aventura parisina radica en ver los armarios de sus personajes, que son una oda a las hipérboles y que se encargan en cada escena de demostrar que Emily es una americana afincada en París que no solo no comprende las claves del estilo parisino, sino que se divierte apostando siempre por diseños que subrayan que se encuentra en todo momento fuera de su zona de confort. Por eso funciona a la perfección la contraposición que se ejerce en cada escena con su jefa, Sylvie, que es el epítome del 'nonchalant' parisino y que funciona para recordarnos que mientras que Emily se divierte con los estampados y los colores, al otro lado del espejo hay un mundo minimalista en el que el buen gusto se compone precisamente de lo contrario.

'The White Lotus' se ha convertido, por su parte, en la serie perfecta para cerrar el año, y el estilo del personaje de Portia ha sido el más comentado a causa de sus looks imposibles. Con la finalidad de capturar el momento que vive el personaje, perdido en la vida, los responsables de vestuario se encargaron de preparar outfits indescriptibles con los que Portia dejá atónitos a la audiencia. Lo que es aún más sorprendente es que este aluvión de armarios repletos de prendas destinadas a dejar sin habla a familiares, y a que la gente se gire por la calle arqueando las cejas responde a un ‘vibe shift’, que es el término que se emplea para explicar que atrás han quedado tendencias como la estética hipster o el normcore. Lo maravilloso este universo WTF es que la moda funciona como distracción y nos ayuda a evadirnos, por lo que se trata de un elemento dopamínico.