De Victoria Beckham a Elle Fanning: el funeral para el recuerdo de Vivienne Westwood

El mundo de la moda se ha reunido en la londinense catedral de Southwark para celebrar la vida de la diseñadora de moda que revolucionó la industria con su alma punk y su vocación activista. En el adiós a Vivienne Westwood no han faltado, por descontado, celebridades enfundadas en algunos de los clásicos de Westwood al lucir diseños de tartán coloridos con siluetas inimaginables, y aunque, por supuesto, el negro ha estado presente, el color del luto no ha aparecido en clave silenciosa y minimalista, sino siguiendo las máximas de la reina del punk-glam.

Si crees que es frívolo hablar de los looks de las invitadas, que no cunda el pánico. Los asistentes habían recibido una invitación con un código de estilo claro: “Ante la duda, ¡arréglate!”. Desde el funeral de Alexander McQueen no habíamos asistido a semejante despliegue de moda, que lejos de ser una banalidad supone la fórmula perfecta para abrazar a quienes dedicaron su vida a la(s) costura(s).

De esta forma se rendía homenaje al lema de Vivienne en un emotivo servicio en el que la actriz Helena Bonham Carter dio unas cariñosas palabras enfundada en un dos piezas de cuadros rojos de Westwood que ya le habíamos visto lucir cuando fue distinguida con la medalla de comandante de la Orden del Imperio Británico (CBE) de la mano de Isabel II. Tras declararse una "adoradora de Westwood" y comentar entre risas a Kate Moss que luchara por declarar un día nacional para disfrazarse de Westwood, la actriz aseguró tener "una cantidad obscena de ropa, algo que a Vivienne no le hubiera gustado con su manifiesto de 'compra menos".

Comentó también que compró una camisa pirata de la diseñadora cuando tan solo tenía 15 años para poder parecerse a Adam Ant y aseguró que siempre apostaba por los vestidos 'coquette' (son siete) de la diseñadora para pisar la alfombra roja por ser “ingeniería corporal instantánea, una protesta estética”. Bromeó con que estos diseños le permitieran disfrutar de un buen “desayuno inglés completo” antes de vestirse. “Si no fuera por Vivienne, estaría desnuda”, dijo la actriz.

La banda Arnfield Brass tocó para comenzar el tema de Abba ‘Slipping Through My Fingers’, y entre los tributos y eulogias, Nick Cave cantó al piano ‘Into My Arms’ y Chrissie Hynde entonó ‘Raining In My Heart’.

Kate Moss ha elegido un vestido camisero de estampado floral hasta los pies combinado con una boina y unos tacones de plataforma XL.

Elle Fanning estaba impresionante con un dos piezas de la marca compuesto por chaqueta de lana plisada con cintura ceñida y silueta evasé sobre vestido negro y un sombrero con red.

Victoria Beckham nos ha dejado de piedra enfundada en un maxivestido negro ceñido calado que abraza su silueta y que le otorga un toque Morticia Addams inigualable. Estuvo en todo momento acompañada de su amigo Marc Jacobs, enfundado en un dos piezas 'casual' accesorizado con collar de perlas.

Georgia Jagger escogió una chaqueta blazer gris de raya diplomática y una sencilla camisa de estética cottagecore, bolso de mano rosa y una manicura azulada.

Emma Weymouth llevó un imponente collar de Chopard combinado con un dos piezas negro de la marca y guantes de piel.

Lily Cole y Paloma Faith fueron fieles al estilo Westwood con sus looks desenfadados y rebeldes.

Eminencias de la moda de la talla de Anne Wintour y Edward Enninful tampoco faltaron a este adiós.