Balmain mira hacia el futuro desde la atemporalidad
La marca ha decidido regresar a los orígenes y dar una lección de costura
Al igual que muchas otras marcas han hecho en sus últimos desfiles, Balmain ha querido con su colección otoño-invierno 2023/2024 centrarse en lo esencial. Así lo indicaba poco antes del desfile a través de los stories de su perfil de Instagram, donde también revelaba que las siluetas atemporales serían vitales esta temporada. La firma habla de una nueva era, pero en esta nueva fase navega más que nunca en los archivos de la marca. El corepearl se impone en majestuosos pendientes y en estructuras que bañan los vestidos dotándoles de elegancia y sofisticación.
Los vestidos de cristal elevan las propuestas prêt-à-porter a una dimensión cercana a la costura. Olivier Rousteing ha querido dejar claro que aunque ha buceado en el pasado y en las entrañas de la marca, lo ha hecho a su manera. Así nos lo ha hecho saber en el cierre del desfile, cuando ha sonado 'My Way', de Frank Sinatra. A través de un profundo análisis de las siluetas clásicas de alta costura, ha revisado algunos diseños de la posguerra de Balmain revisionados desde su particular mirada.
El desfile ha comenzado con un majestuoso traje de chaqueta de raso con grandes hombreras, que sin duda son imprescindibles la temporada que viene. El diseño, de silueta cruzada, cuenta con grandes solapas de raso a contraste, en color blanco. El binomio blanco y negro ha reinado al comienzo del show, cuando hemos visto dos piezas evasé de lana, pantalones acampanados con chaquetas de silueta poncho y chaquetas deconstruidas de arquitectura y patronaje impecables.
Las chaquetas han sido, al igual que en el desfile de Saint Laurent, las protagonistas del show, especialmente al comienzo, cuando hemos visto cómo se convertían en sensuales tops gracias a la silueta ‘off the shoulders’ y a sus marcados escotes. Mientras que otras marcas han apostado por la sencillez y la funcionalidad plena, el desfile de Balmain ha sido un homenaje a la costura, pues cada prenda tiene infinitas capas y secretos.
Tops con detalles origami, trajes con estampado monograma a tono y tops de manga larga con corsés integrados han sido algunas de las pinceladas de este espectacular desfile. Las perlas han tomado los vestidos, los tops (subrayando la zona del pecho, como cada vez es más habitual) e incluso los trajes, pues uno de los más aplaudidos ha sido un dos piezas compuesto por top y pantalón que aúna la estética deportiva y la sofisticada.
Las minifaldas se vuelven espectaculares, con asimetrías llamativas y volúmenes 3D que se repiten en tops fucsias y en vestidos metalizados. El látex no ha faltado en el ‘fashion show’ con vestidos asimétricos y trajes de hombreras ‘wow’ combinados con bolsos rosas metalizados y tornasolados. Los accesorios hacen guiños al logo de la casa y adoptan siluetas insospechadas como las que dibujan bolsos que emulan la forma de las cajas de herramientas.
También destacan maxibolsos que conviven a su vez con zapatos delicados con lazadas laterales frente a maxiplataformas perladas y, por supuesto, opulentas joyas. Diademas joya que decoran desde la frente hasta la nuca acompañan a vestidos estructurados de estética ‘vampire chic’, un look con el que nos encantaría ver pronto a Milena Smit, que ya ha apostado en más de una ocasión por la marca de Olivier Rousteing. De hecho, ¿qué otra actriz es tan experta en hacer las cosas a su manera?
Al igual que muchas otras marcas han hecho en sus últimos desfiles, Balmain ha querido con su colección otoño-invierno 2023/2024 centrarse en lo esencial. Así lo indicaba poco antes del desfile a través de los stories de su perfil de Instagram, donde también revelaba que las siluetas atemporales serían vitales esta temporada. La firma habla de una nueva era, pero en esta nueva fase navega más que nunca en los archivos de la marca. El corepearl se impone en majestuosos pendientes y en estructuras que bañan los vestidos dotándoles de elegancia y sofisticación.