Es noticia
Menú
El porqué del resurgir de la hombrera infinita
  1. Estilo
  2. Moda
TENDENCIAS DE MODA

El porqué del resurgir de la hombrera infinita

Desde Stella McCartney hasta Saint Laurent han apostado por hombreras interminables con más centímetros de longitud que vergüenza... y sabemos las razones

Foto: Saint Laurent. (EFE/Teresa Suárez)
Saint Laurent. (EFE/Teresa Suárez)

Hasta ahora era habitual vincular las hombreras con los años 80, pero, indudablemente, 2023 va a ser un digno sucesor, pues como hemos observado en prácticamente todos los desfiles de las semanas de la moda internacional, son la tendencia absoluta. Desde Max Mara hasta Stella McCartney, las hombreras en clave maxi han sido las innegables estrellas de los desfiles, erigiéndose en este campo Saint Laurent como la mejor representante de esta moda. Su director creativo, Anthony Vaccarello, ha asegurado que ha llevado la tendencia al límite al crear chaquetas que, de un hombro al otro, miden 52 centímetros, por lo que hablamos de un aumento de 10 centímetros respecto a sus comunes diseños.

placeholder Alberta Ferretti. (Reuters/Alessandro Garofalo)
Alberta Ferretti. (Reuters/Alessandro Garofalo)

Ha indicado que su intención era que, aunque fueran extremas, los modelos que a posteriori puedan adquirir sus clientas sean de las mismas proporciones, para no sentir así que la ropa es un disfraz, frente a la estrategia de tantas marcas que en los desfiles presentan versiones más exageradas de las que más tarde terminan por ponerse a la venta. Por su parte, Alberta Ferretti apuesta por hombreras que de un año al otro han aumentado 8 centímetros y, como ella misma ha asegurado, lo ha hecho para convertir al hombro en la parte central del cuerpo. Sin duda, una inmensa hombrera es la forma perfecta para subrayarlo.

placeholder Saint Laurent. (EFE)
Saint Laurent. (EFE)

Las hombreras inmensas de los años 80 supusieron la fórmula de las mujeres para adentrarse en un universo laboral eminentemente masculino, pero su regreso ya no tiene que ver con derribar las desigualdades de trabajo, sino con devolver a las mujeres el control de su cuerpo ante un presente que se lo intenta arrebatar. Supone también una forma de subvertir la mirada masculina de la mano del furor por el #BimboTok, que ha puesto al feminismo en el epicentro de TikTok. Al apropiarse de la palabra 'bimbo', que hace alusión a mujeres atractivas e ingenuas a las que se les presupone una inteligencia limitada, reivindican la feminidad al margen de la mirada del hombre. También funciona como defensa ante esas miradas y ante las convenciones, pues al perfilar siluetas parecidas a las de los jugadores de rugby, crean una especie de armadura estilística que manda el mensaje de que quien la lleva está preparada para luchar.

placeholder El desfile de Balmain. (Getty/Kristy Sparow)
El desfile de Balmain. (Getty/Kristy Sparow)

Como asegura Sonnet Stanfill, comisario artístico en el Victoria and Albert Museum, a Vanessa Friedman, los hombros son “la parte del cuerpo más conectada a un poder visual de fuerza y poder”. Por su parte, Rebecca Caldwell señala que “cuanto mayor es la carga económica que descansa sobre los hombros de una mujer, más grandes son las hombreras”.

placeholder Cate Blanchett. (EFE/Nina Prommer)
Cate Blanchett. (EFE/Nina Prommer)

El boom de las hombreras servirá en el futuro también para comprender el mundo tras el confinamiento, cuando aseguramos que los tacones tenían los días contados (el regreso de los diseños vertiginosos demuestra que estábamos equivocados) y creímos que el ‘cottagecore’ y la moda más holgada y cómoda había llegado para quedarse. Un paréntesis: no hemos de olvidar que en la era de las reuniones por Zoom, las hombreras triunfaron al rescatarnos de la moda de estar por casa, esa que no funciona en las reuniones laborales y que, gracias a las hombreras, fue capaz de restituir el poder.

placeholder Stella McCartney. (Reuters/Sarah Meyssonnier)
Stella McCartney. (Reuters/Sarah Meyssonnier)

Sin embargo, cuando las restricciones fueron cayendo, también lo hicieron las siluetas más amplias. Por eso ahora los desfiles han propuesto inmensas hombreras, pantalones ceñidos y tacones imposibles: para subrayar el cambio de era. Resulta curioso que sea precisamente cuando el teletrabajo sigue luchando para imponerse, aunque según el Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo, aproximadamente la mitad de los teletrabajadores surgidos por la pandemia ha vuelto a trabajar exclusivamente de modo presencial, el momento en el que la tendencia más agresiva y neoliberal, destinada al comienzo a abrirse hueco en la oficina, regrese. Lo que no tiene que sorprendernos es que en un momento en el que las mujeres siguen luchando por reivindicar el control, hayan encontrado en las hombreras a unas aliadas para reivindicar también su espacio y revertir los códigos.

Hasta ahora era habitual vincular las hombreras con los años 80, pero, indudablemente, 2023 va a ser un digno sucesor, pues como hemos observado en prácticamente todos los desfiles de las semanas de la moda internacional, son la tendencia absoluta. Desde Max Mara hasta Stella McCartney, las hombreras en clave maxi han sido las innegables estrellas de los desfiles, erigiéndose en este campo Saint Laurent como la mejor representante de esta moda. Su director creativo, Anthony Vaccarello, ha asegurado que ha llevado la tendencia al límite al crear chaquetas que, de un hombro al otro, miden 52 centímetros, por lo que hablamos de un aumento de 10 centímetros respecto a sus comunes diseños.

Tendencias
El redactor recomienda