Estas son las cinco tendencias en joyas para esta primavera
Pendientes XXL, piezas en metacrilato o detalles de flores: te contamos cuáles son los 'must' que triunfan sobre la pasarela y te harán brillar esta temporada
Las joyas son siempre el toque maestro de un look, ese broche de oro capaz de dar un giro completo al estilismo. Es más, en ocasiones, acaparan todo el protagonismo. Esta temporada, sobre la pasarela hemos visto infinidad de propuestas, pero, entre todas ellas, hay cinco que se alzan como los grandes ‘must’ de la estación, encabezando ese podio de tendencias que no pueden faltar en nuestro armario –o, en este caso, joyero– durante la primavera-verano 2023.
Eso sí, olvídate de la discreción porque te avanzamos que, en casi todas ellas, manda el maximalismo. Y es que cada una de estas piezas clave busca acaparar todo el protagonismo y hacerte deslumbrar.
Piezas ‘bouquet’
Esta primavera, las flores brotan sobre algunos de los tesoros más deseados de la estación. El romanticismo manda y conquista cualquier creación: pulseras, anillos, collares... Todo vale. Eso sí, en este caso, el oro y la pedrería se dan la mano para dar vida (y color) a estos diseños. Nos encanta la propuesta de la etiqueta australiana Zimmermann, donde unos pendientes se convierten en todo un jardín.
Brazaletes ‘bold’
Olvídate de las pulseras delicadas porque ahora triunfan las piezas rígidas y en formato maxi. Además, traspasan la frontera de la muñeca para decorar la totalidad del brazo. Si buscas un referente, que sea una de las creaciones de Anthony Vaccarello para Saint Laurent porque son el ejemplo perfecto de cómo lucir esta tendencia. Y es que, al combinarlo con negro, juegan un papel indudablemente principal.
Pendientes ‘extralarge’
El tamaño importa, y mucho. Al menos, en lo que a pendientes se refiere. Los diseños de esta temporada se alargan para caer por debajo de los hombros y llegan, incluso, a rozar la clavícula. Virginie Viard los imagina minimalistas y en strass para Chanel y Proenza Schouler los decora con pedrería cristalina, mientras que Nicolas Ghesquière firma para Louis Vuitton su versión más barroca, en pedrería multicolor.
Transparencias
El metacrilato da vida a diseños que juegan al ‘veo, veo’, dejando vislumbrar la piel bajo sus formas arquitectónicas. Y es que, en este caso, pese al minimalismo aparente del material, las siluetas son claves y adquieren proporciones esculturales. Además, son el lugar perfecto para presumir de logo: palabra de Givenchy y Chanel.
Gargantillas Y2K
Esta es, quizás, la única licencia a la simplicidad. Con el regreso de los 2000 a lo más alto de la pasarela, vuelve también uno de sus imprescindibles en materia de joyas: los chokers. Isabel Marant recupera una de sus versiones más icónicas, en forma de un simple cordón que gira alrededor del cuello y que, además, la diseñadora remata con pequeños detalles de plata. Y es que este metal empieza a recuperar su fuerza en el joyero con el regreso de esta década.
Una cosa está clara: no hay duda de que estos ‘must have’ se convertirán en las piezas favoritas de las insiders y harán brillar los looks estivales a golpe de sofisticación y, por supuesto, una dosis extra de tendencia.