Todo sobre el armario de 'The Idol', la serie de The Weeknd y Lily-Rose Depp

Es prácticamente imposible que no hayas oído de todo (menos posible es que hayas oído algo bueno, en realidad) acerca de 'The Idol', la serie de HBO en la que The Weeknd y Lily-Rose Depp comparten más escenas subidas de tono que versos. Las críticas no solo se centran en la escasa calidad interpretativa del cantante, sino en la mirada masculina y misógina que baña al argumento y que ha hecho a muchos preguntarse cómo es posible que en la era post #MeToo, sigamos contando con contenido audiovisual que romantiza los abusos.

Sin embargo, quienes han señalado al vestuario del personaje de Jocelyn como machista o bañado por la lascivia masculina han de saber que la encargada de vestuario, Natasha Newman-Thomas, asegura que, en realidad, cada look viene a contar su historia de poder y cómo la propia Lily se apropia de su sexualidad. De hecho, pasa gran parte del primer capítulo enfundada en una bata de seda roja diseñada 'ad hoc' por la propia encargada de vestuario junto a Muto-Little, en Los Ángeles. El look está inspirado en una imagen de 1955 en la que Marilyn Monroe adopta una pose similar a la que pone Depp.

La moda que pasa de ser un instrumento de poder a un arma de tortura es habitual en la serie, siendo el mejor ejemplo el diseño con el que graba el videoclip, que es un look creado por la propia Natasha junto con Nusi Quero y que se compone de un bralette y un body encorsetado. No es casualidad que la marca no diseñe moda pensada para el escenario, pues así queda claro que el look no ha sido creado para aportar comodidad ni movilidad, y teniendo en cuenta la exigencia de la coreografía que la protagonista ha de poner en marcha en el vídeo, de esta forma la moda se asegura de aprisionar al icono pop. Por cierto, la marca es la que firma también el look de la portada del disco de Beyoncé, algo que no sabían durante el rodaje.

Aunque es habitual que cuando las embajadoras de Chanel participan en una película, el largometraje se convierta en una suerte de campaña visual de la maison, como ha ocurrido tantas veces con Kristen Stewart, en el case de Depp tan solo la vemos lucir unas gafas de sol de la firma francesa y joyas que la propia marca envió para el rodaje. Lo cierto es que en la película no tendría sentido una predominancia de la firma, pues su sofisticación no encaja con el mensaje del argumento.

Lo que sí hemos detectado han sido unos zapatos de la era de Nicolas Ghesquière para Balenciaga, diseños vintage de Prada y unos impresionantes vaqueros ‘bumster’ de Alexander McQueen que combina con un crop top negro. Otro de los looks más icónicos es un sensual minivestido de la marca de Los Ángeles Aya Muse. Cuando ensaya la coreografía de su nuevo single, luce un dos piezas en el que la estrella es un microtop, un conjunto compuesto por minifalda de Guizio y top de Didu. Para hacerse con el escenario apuesta por un vestido 'custom made' de Greg Lauren inspirado en su colección del año 2016.

En el tercer capítulo vemos a Jocelyn enfundada en un total look de Saint Laurent (es el de la imagen), mientras que para organizar una cena entre amigos apuesta por un diseño de encaje de Maison Margiela. Durante una entrevista con la revista ‘Vanity Fair’, luce un vestido de satén de Nana Jacqueline, y mientras tanto, el resto de los personajes lucen diseños de firmas como Marni y Gucci, una prueba más de que la moda es sin duda un personaje más en la serie, en la que cada look es elegido para resaltar la situación emocional de sus personajes. La moda es pretendidamente sexy, pero juega un doble papel al empoderar a la protagonista al tiempo que limita su movilidad, una metáfora textil del control que la industria ejerce sobre ella.

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Paula Mata

El armario del personaje se compone siempre de piezas que realzan las complejidades de la protagonista y nunca cuenta con diseños relajados, dejando así claro que las estrellas del pop nunca pueden bajar la guardia. De hecho, al inspirarse tanto el personaje como su armario en tantas ocasiones en Britney Spears, es importante que quede claro que su armario ha sido orquestado para un personaje que puede ser fotografiado en todo momento, pues así queda latente la obsesión que los paparazzi tienen. Lo que la moda no intenta en ningún momento es expresar la personalidad de Jocelyn, que luce todo tipo de estilos y tendencias precisamente para recalcar la idea de que ni siquiera sabe realmente quién es.

Mientras tanto, The Weeknd permitió a la responsable de vestuario que eligiera los looks a su antojo, por lo que Newman-Thomas ha confesado que fue un sueño trabajar con él, que cedió su casa para el rodaje, por lo que muchas de las escenas fueron rodadas ahí. La moda de 'The Idol', en definitiva, se encarga de subrayar el control que la industria y la sociedad ejercen sobre los iconos pop, dejando claro que las costuras narran tanto como cualquier diálogo.