Giovanna Battaglia y el arte de vestir cual Carrie Bradshaw 24/7

Los fashion insiders saben bien quién es Giovanna Battaglia Engelbert, un auténtico icono en el mundo de la moda que comenzó su carrera a los 16 años desfilando para Dolce & Gabbana. La marca se dio cuenta pronto de que la italiana no era solo una cara bonita, sino, ante todo, un referente de estilo capaz de llevar cualquier outfit sin resultar estridente. Del mismo modo que cuando vemos a Sarah Jessica Parker pasear por las calles de Nueva York en la serie con looks recién salidos de la pasarela no nos parece extraño, y al igual que cuando Lily Collins hace lo propio en 'Emily in Paris' por la calles parisinas pensamos que todo está en orden, cuando Giovanna luce uno de sus outfits, en ocasiones incluso exclusivos, nada nos chirría.

Pensamos que lleva, sencillamente, un look 'muy Battaglia'. Las personas que son capaces de hacer de la extravagancia su seña de identidad se caracterizan por no dejar a nadie indiferente, por ser valientes y, por supuesto, por haber convertido su armario en su mejor arma de expresión. En nuestro país podríamos hablar de Madame de Rosa como el caso patrio de este logro fashionista, y sin duda tener un estilo tan reconocible como inclasificable es apto solo para quienes conocen tanto las tendencias que ni siquiera se molestan en seguirlas, sino en crearlas. Como directora creativa de Swarovski se ha propuesto dar a la popular firma de joyería un giro en el que su estilo está, por supuesto, presente.

“Trabajo con Swarovski desde 2016, encabezando la parte creativa del negocio B2B. Fue un gran honor haber sido nombrada directora creativa, pues mi nuevo cargo es una evolución natural y ahora cubre todos los aspectos creativos de Swarovski en su totalidad. Por lo tanto, ¡supongo y espero haber hecho un buen trabajo desde entonces! Mi objetivo es darle al cristal una dimensión nueva, más fresca y más inteligente, y ese objetivo resultó ser la combinación perfecta con lo que Swarovski está buscando”, explicó a ‘Fashion Week Daily.’

Aunque para muchas celebridades llevar diseños vintage es una novedad que, paradójicamente, responde a una tendencia, pues mirar hacia el pasado es ahora lo más futurista, ella siempre ha manejado la fórmula al haber tenido toda su vida acceso a los archivos de las mejores marcas de moda.

Por eso, en su escapada a Sicilia apostó por este dos piezas vintage de Dior que, por supuesto, combinó con collar de Swarovski y zapatos de Aquazzura que, en un giro inesperado, perdió tras la fiesta.

Lo interesante es que queda claro que la marca de joyas no solo se aprovecha de la sapiencia fashionista y del estilo de la italiana, sino también de su papel como referente de moda y de su fuerza en las redes, por lo que ella siempre combina sus exquisitos diseños con piezas de Swarovski. De esta forma, no solo ha renovado la imagen de la firma, sino que también consigue que sus creaciones sean aspiracionales al llevarlas ella misma en su día a día.

Pero no solo hace promoción de la marca que paga su salario, sino también del imperio de moda de su hermana, como demuestra al llevar este top calado de Sara Battaglia. Lo combina, por cierto, con joyas de una de sus marcas de joyería fetiche (que no nos lea Swarovski, por favor), Engelbert. Si te preguntas cómo es posible que la directora creativa de una marca de joyas coquetee constantemente con otra firma, aquí tienes la razón: su marido es ​​Oscar Engelbert. Todo queda en casa.

Si algo hemos aprendido de la última Semana de la Alta Costura es que incluso el denim puede ser ahora materia couture, y ella lo demuestra con estos jeans de Denim Capital a los que suma un espectacular cinturón joya de Chanel, una camiseta básica (¡incluyo ella lleva prendas básicas, aunque parezca imposible!) y joyas de Swarovski que demuestran que su sello está muy presente en el proceso creativo y en el imaginario de la firma.

De hecho, es experta en mezclar prendas de las grandes marcas con sus propias creaciones, como podemos observar cuando luce este diseño de Chanel con joyas de la colección Florele, de Swarovski. Lo que queda claro es que el cambio de editora de moda a directora creativa ha sido un acierto, pues poder tener ahora su estilo encapsulado en joyas es una bendición para quienes aman la moda.

“Mirando hacia atrás, toda mi experiencia ha estado siempre amparada bajo el paraguas de la creatividad, en diferentes facetas. Mi trabajo como consultora me ha dado la oportunidad de estar al día con el mundo del espectáculo, con actores y cantantes, y con la industria de la moda. Puedo tomar todo mi conocimiento de los últimos 20 años y ponerlo en un solo lugar para Swarovski, que también es una empresa interdisciplinaria y multidisciplinaria”, ha explicado.

Su estilo es especialmente delicioso en tiempos del lujo silencioso y del abrazo minimalista que tantas marcas han hecho, pues la forma en la que se atreve a mezclar estampados y tendencias, su apuesta cromática y, en definitiva, su capacidad para saltarse las normas es precisamente lo que necesitábamos en un momento en el que un armario triptófano es tan atractivo (o casi) como una escapada a la playa. Si no tienes cerca una calita, si las vacaciones aún no llegan o si los problemas no paran de golpear a tu puerta, haz como Battaglia y deja que tu armario se convierta en tu armadura.