El lavado de cara de la tendencia cargo por Isabel Marant: boho y ultrafemenina

A diferencia de las marcas coetáneas a la suya, apostando bien por supertendencias, o bien por líneas rebajadas en estilo e ideadas para vender, Isabel Marant ha mantenido a raya su esencia boho y, por ende, su cartera de incondicionales. Lanzada en 1994, la enseña es sinónimo del 'effortless chic' más puro, y en todos y cada uno de sus looks encarna el estilo parisino por excelencia. Solo se adapta a la estacionalidad, porque la esencia Marant sigue tan viva como intacta en todas sus propuestas.

"Solo silba y estaremos allí. El desfile Isabel Marant SS24 tendrá lugar hoy en el Palais-Royal de París. ¡Nos vemos pronto!", este es el mensaje con el que la firma calentaba motores en las redes sociales. Unas palabras que venían a acompañar un vídeo dirigido por Guillaume Jolly en el que la diseñadora, alternando planos con varios modelos masculinos y femeninos, silbaba a cámara.

El suyo viene precedido por las propuestas nada primaverales de Dior y The Row, el regreso a la esencia de Saint Laurent o la explosión floral de Balmain. La embajadora del estilo bohemio ha hecho, una vez más, lo que mejor sabe: enamorar a sus clientas con prendas que se convertirán en bestsellers de sus tiendas. ¿Entre ellas? Pamela Anderson, sí, también ha estado en el desfile de Marant.

En esta ocasión, la diseñadora ha tomado prestado el cargo, el emblema de la corriente utilitaria, y dándole un impecable lavado de cara, ha logrado que pantalones y chaquetas repletos de bolsillos muten hacia su mundo, el boho chic francés.

Para lograrlo, además de modificar sustancialmente el patrón original que defiende la corriente, se ha valido de tejidos livianos propios de la estación estival. Materiales satinados de acabado brillante, linos rústicos, popelín, denim e, incluso, algún efecto cuero. Todo en una gama cromática que no se ha escapado de cuatro tonos: negro, blanco, rojo y beis, el tono 'utility' por excelencia.

La presencia de pantalones, cortos, midi, o largos, se ha incrementado en la nueva colección de Marant. No es de extrañar si tenemos en cuenta que la tendencia cargo precisamente arrancó con esta prenda. Dotados de siluetas más relajadas que evocan a esos looks frescos del verano, las cinturas han bajado varios centímetros mientras mantenían una línea amplia más estética. A esos pantalones les han acompañados bodys con inserciones muy marcadas, camisetas de punto o blusas con calados. ¿El objetivo? Contrarrestar la imagen tosca con altas dosis de feminidad, la especialidad de la casa.

Que los pantalones hayan sido los reyes indiscutibles no ha quitado para que, de tanto en tanto, la creadora haya empastado sus clásicos vestidos de corte lencero con abrigos parachute que extendían sus dominios hasta rozar el suelo. A esas prendas de abrigo Marant ha añadido cortavientos, chaquetas oversize y chalecos como imprescindibles para un fondo de armario a la moda.

En el terreno de los accesorios, y por mucho que lo neguemos, la diseñadora pronostica que los zuecos se van a situar en la cumbre. Con una pala ancha y la longeva suela de madera, no seremos nadie fashionistamente hablando si no nos subimos a unos.

Llegando al final de la propuesta, la estética disco se ha apoderado de las prendas. Denim bordado con paillettes, vestidos de flecos metálicos, tops 'cut out', pantalones ceñidos con fruncidos, escotes asimétricos, tejido red, estampados psicodélicos brillantes y, así, una pequeña muestra de lo que llevaremos durante las noches de verano.