Pelo (y borrego) hasta en los pies, el remedio cool contra el frío

Desde que Alessandro Michele hace ya muchas temporadas les dio aspecto de mascotas a los míticos Horsebit de Gucci, se inició una tendencia que permanece entre las influencers y que parece que este invierno pega más fuerte que nunca.

Vemos sandalias tipo Birckestock, botas, katiuskas o zuecos con interiores forrados que invitan a no salir de ese look calefactable que apoyan los abrigos tipo 'teddy' y que nos invitan a convertir nuestros looks en semipeluches. Una tendencia especialmente adaptada por las streetstylers escandinavas, que en estos zapatos han encontrado la mejor forma de aunar estilo y huir de las gélidas temperaturas de sus países.

Esta tendencia peluda se remite a la década de los ochenta. Los orígenes del furry vienen de una subcultura interesada en personajes animales antropomórficos con personalidades y características humanas.

Sin embargo, la idea de los animales antropomórficos y su incorporación a la moda y otros aspectos de la cultura se puede ver en épocas anteriores. La moda furry, que implica usar ropa o accesorios inspirados en animales, ha ganado popularidad en las últimas décadas. La tendencia ha experimentado altibajos en popularidad, pero ganó más visibilidad y aceptación dentro de ciertos círculos a medida que internet permitió una mayor visibilidad y con el remate de Michelle, que la incorporó en sus colecciones con máximo protagonismo.

Este invierno incide especialmente en los zuecos, un tipo de calzado que es especialmente empleado en los países del norte de Europa y que desde la primavera pasada ha vuelto a nuestros armarios. Su característica suela de madera y estilo distintivo se han ganado un lugar en las calles de nuestras ciudades este invierno. Y ahora, además, vienen forrados para soportar las bajas temperaturas y así cuentes con la opción (si no eres friolera) de llevarlos sin calcetines.

Su forro interior de pelo natural o sintético tipo peluche, según la marca, proporciona un toque distintivo y mantiene los pies calentitos en los fríos días de invierno. Además, la suela plana y cómoda los convierte en una opción ideal para el uso diario.

Como nos cuentan desde Hunter: "Mientras mantienen tus pies calentitos y cómodos, también añaden un toque de extravagancia a tu look. Esto los convierte en un calzado versátil que puedes llevar día tras día, desde con una falda estampada hasta con unos calcetines de colores a contraste. Entre los colores más populares de las nórdicas son el negro, beige y crudo: tonos clásicos que permiten una fácil combinación con todo tipo de outfits".

Y recordemos que ellos no podían ser menos.