Es noticia
Menú
Las dos técnicas de moda infalibles para un efecto estilizador instantáneo
  1. Estilo
  2. Moda
IDEAS DE LOOKS

Las dos técnicas de moda infalibles para un efecto estilizador instantáneo

Rescatamos dos métodos clásicos empleados cientos de veces por diseñadores y marcas para recordarte que sus patrones esconden superpoderes

Foto: Un vestido de Diane von Furstenberg. (Cortesía)
Un vestido de Diane von Furstenberg. (Cortesía)

Nadie nos conoce mejor que nosotras mismas. Aunque nos pese, con el paso de los años, hemos ganado en madurez y sabiduría, y eso se nota a la hora de vestirnos. Explotar nuestros puntos fuertes y disimular las pequeñas flaquezas, siempre orgullosas de lo que somos, es una práctica que en mayor o menor medida ponemos en marcha a diario con éxito. Ese expertise no quita para que, de vez en cuando, merezca la pena recordar las grandes (y ancestrales) técnicas que nos ayudan a materializar un efecto estilizador instantáneo.

Te avanzamos que no vamos a descubrirte ninguna novedad. Los dos métodos que hoy nos ocupan llevan décadas presentes en la industria. Un par de técnicas clásicas empleadas cientos de veces por diseñadores y marcas para recordarte que sus patrones esconden superpoderes: drapeados y prendas 'wrap'.

Drapeados

placeholder Una insider con un vestido drapeado. (Launchmetrics Spotlight)
Una insider con un vestido drapeado. (Launchmetrics Spotlight)

El drapeado es, probablemente, una de las técnicas más arraigadas en la historia de la civilización humana y en la cultura de la moda. Desde aquellos primeros vestidos drapeados que envolvían las figuras femeninas de las esculturas griegas -por cierto, con altas dosis de sofisticación-, esta costura de culto se las ha arreglado para trascender en el tiempo y mantenerse infranqueable. Su boom en la moda se produjo en la década de los 20, cuando la diseñadora francesa Madeleine Vionnet comenzó a emplearlo en sus trajes.

Realizada a mano a través de pliegues en distintos sentidos, con el drapeado se generan nuevas texturas y volúmenes. Fruncir, plisar, arrugar o, en definitiva, drapear una prenda (todas son susceptibles al efecto) es sinónimo de una figura afinada.

placeholder Un vestido de Blumarine. (Launchmetrics Spotlight)
Un vestido de Blumarine. (Launchmetrics Spotlight)

Silueta 'wrap'

placeholder Chiara Ferragni. (Launchmetrics Spotlight)
Chiara Ferragni. (Launchmetrics Spotlight)

Quien más, quien menos tiene algún 'wrap dress' en su armario. Ya sabes cómo es, un vestido que, independientemente de otros rasgos como el largo, el tipo de mangas o el tejido, se diferencia del resto por su diseño cruzado. Desde que su inventora, la diseñadora Diane von Fürstenberg, lo lanzara en la década de los setenta, solo le ha deparado un éxito tras otro. Porque, además de concebir uno de los hitos de la historia de la moda, este vestido cruzado es la creación con mayúsculas de la diseñadora.

Ese patrón se ha extrapolado al resto de piezas que albergamos en el guardarropa: americanas, faldas, tops, camisas... Pero, ojo, que la alemana no solo lo creó para ser único en su especie, también para estilizar a todo tipo de mujeres, sin importar su figura, su altura y su silueta.

placeholder Una americana cruzada. (Launchmetrics Spotlight)
Una americana cruzada. (Launchmetrics Spotlight)

Ese cruce casi mágico tiene el poder de favorecernos a todas, sí, has leído bien. Enfundarte en un patrón wrap en cualquier prenda es sinónimo de lucir tipazo y el secreto precisamente radica en el cruce delantero y lateral con el que en la mayoría de los diseños, además, se cierran.

Nadie nos conoce mejor que nosotras mismas. Aunque nos pese, con el paso de los años, hemos ganado en madurez y sabiduría, y eso se nota a la hora de vestirnos. Explotar nuestros puntos fuertes y disimular las pequeñas flaquezas, siempre orgullosas de lo que somos, es una práctica que en mayor o menor medida ponemos en marcha a diario con éxito. Ese expertise no quita para que, de vez en cuando, merezca la pena recordar las grandes (y ancestrales) técnicas que nos ayudan a materializar un efecto estilizador instantáneo.

Tendencias
El redactor recomienda